Historias que nos unen: Alberto, Irenea y sus 4 pilares del amor

Nota de prensa
Usuarios de Pensión 65 forman una de las parejas más emblemáticas de Mamachapampa.
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8 de febrero de 2025 - 8:00 a. m.

“Cada vez que nos preguntan cuál es el secreto para mantener y fortalecer el amor, buscamos la respuesta en nuestros recuerdos”, afirmó Alberto Curo Silvestre (71), quien junto a Irenea Arana Coronado (72) forman una las parejas más emblemáticas de la comunidad de Mamachapampa, ubicado en el distrito de Anco, provincia de Churcampa (Huancavelica).

Los protagonistas de esta historia se conocieron cuando tenían 20 años. Ambos son naturales de una localidad de la selva peruana, pero después de cruzar sus vidas y descubrir la pasión que tenían por el campo y la agricultura, decidieron migrar al departamento de Huancavelica. “Todo fue muy rápido, nos enamoramos y decidimos formar un hogar en un lugar tranquilo y lleno de paz”, agregó la septuagenaria.

Reposando su mano en la pierna de su esposo, Irenea confesó que de joven no se sentía muy bien con su apariencia, porque a los 8 años tuvo un accidente donde perdió el ojo derecho. “Tomé mayor fuerza y salí adelante, aunque fue más difícil. Al final, encontré a Albertito, que no dudó en acompañarme y ser mi fortaleza”, relató.

Han pasado más de 5 décadas juntos y ahora que son parte del programa Pensión 65, comparten sus conocimientos sobre agricultura y medicina ancestral en los encuentros de saberes productivos. Su participación activa los ha convertido en una de las parejas más admiradas de su distrito.

Pilares de su amor

Llenos de paz y resiliencia, contaron su secreto para mantener una vida plena dentro de su hogar. “Tenemos 4 pilares dentro de casa que nos han permitido seguir juntos e inculcar valores en nuestros 7 hijos”, mencionó Arana Coronado.

“Nuestros pilares son la lealtad, la confianza, el respecto y, sobre todo, la perseverancia”, enfatizó Curo Silvestre. “Ahora vemos que los jóvenes se separan muy pronto, no tienen comunicación y se complican con cosas que se podrían decir y solucionar. Creo que por eso hay muchachos que vienen a casa a preguntarnos estas cosas o que les demos consejos”, comentó Alberto.

La pareja derrocha ternura y muestras de amor, desde caricias y poemas, hasta palabras de aliento cuando alguno amanece con pocos ánimos para empezar sus actividades del día. En medio del mes donde se celebra San Valentín, Alberto e Irenea son un ejemplo de unión y esfuerzo, además por la forma cómo han conservado un sentimiento bello, puro y sincero, en base a sus 4 pilares que vienen inculcando en las nuevas generaciones.

Hogar lleno de fe

Para Alberto e Irenea, todo lo que pasa en la vida tiene un motivo y deja aprendizaje. “Somos cristianos y lo que hemos aprendido es que hay un propósito para todo. Hemos pasado momentos complicados y llenos de dolor, como el fallecimiento de 3 de nuestros hijos. Quedamos devastados, pero asimilamos lo que ocurrió y ahora tenemos 3 ángeles que nos cuidan desde lo más alto del cielo”, concluyó Arana. “Las arrugas de nuestros rostros reflejan lo que vivimos, pero siempre manteniendo nuestra fe intacta”, añadió Curo.



Huancavelica, 8 de febrero de 2024
Unidad de Comunicación e Imagen
Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65

Esta noticia pertenece al compendio Historias Que Nos Unen