Historia que nos unen: Tejidos artesanales cerca al cielo de Lima

Nota de prensa
Olga Alberco, usuaria de Pensión 65, fue reconocida por su aporte cultural
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14 de diciembre de 2024 - 9:00 a. m.

En el anexo de Chinchagoza, uno de los puntos más altos del distrito de San Andrés de Tupicocha (Huarochirí), donde las personas despiertan con los primeros rayos de sol y viven llenos de paz por su cercanía al cielo de Lima, se encuentra Olga Alberco Caro que a lo largo de sus 70 años ha demostrado ser más fuerte que las adversidades.

“Desde muy pequeña aprendí a tejer bolsos, carteras, entre otras cosas, con fibras de maguey para hacer las tradicionales shicras y cushure; más o menos a los 9 años, gracias a mi madre. Lamentablemente, ella falleció. Me quedé con mi padre, tuve que asimilar el dolor y tomar este arte como el recuerdo más grande que me dejó mi mamita. Desde ese momento no me detuve”, detalló la adulta mayor.

Olga Herlinda reforzó sus conocimientos y práctica gracias a las clases de arte que impartieron en el colegio de su localidad. Su habilidad con las fibras naturales y el manejo de la lana le permitieron crear su imagen como tejedora. “Hasta frazadas hacía, pero bajé esa producción por el esfuerzo que requería”, precisó.

“Mi madre me dejó un bonito legado, con el que pude generar un ingreso y mantener su presencia en mi corazón”, añadió, mientras levantaba su crochet y entrelazaba los hilos. Con el pasar de las décadas, la septuagenaria se incorporó al programa Pensión 65, donde aprovechó los encuentros de saberes productivos para demostrar su habilidad con las manos.

“La Municipalidad de San Andrés Tupicocha me ha apoyado, al igual que el programa social, porque las ferias que hacen son una oportunidad para vender nuestros productos y que haya más turistas en nuestro amado Chinchagoza, que tiene tanto por mostrar, como su hermosa iglesia, elegantes calles y ricos platos, como el caldito de mote”, sostuvo con cariño.

Gran legado

A sus 70 años, Alberco Caro se estableció como objetivo transmitir el gran legado de su madre a las nuevas generaciones. Recordó que su hija Silvia aprendió muy rápido desde niña y ahora que ya pasa las cuatro décadas, pasó a ser su compañera de trabajo y uno de sus soportes más hermosos de la vida.

“Me ayuda mucho y hemos logrado tener nuestro emprendimiento. Ella complementa mi técnica y deja volar su imaginación con los colores, también me apoya con el uso de la tecnología, porque recibe los pedidos al celular (997036236). Estoy muy agradecida por todo y la herencia cultural que dejaremos, porque tengo más de 15 nietos y 5 bisnietos, a los que he visto y los más grandecitos ya han tomado interés. Por eso, muchos vecinos dicen que somos la familia que teje cerca al cielo de Lima”, concluyó llena de esperanza.

Ruraq Maki

El talento de Olga la llevó a ser elegida por la municipalidad de su distrito para representar los saberes ancestrales de los usuarios de Pensión 65 en la feria Ruraq Maki, que se viene desarrollando en el Ministerio de Cultura. La septuagenaria promocionará sus productos hasta este domingo 15 de diciembre, en el segundo piso de la exposición. El último viernes, el programa del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social le entregó un reconocimiento por mantener y fortalecer la identidad cultural de su localidad y el país.



Lima, 14 de diciembre de 2024
Unidad de Comunicación e Imagen
Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65

Esta noticia pertenece al compendio Historias Que Nos Unen