Historias que nos unen: La voz ancestral y reflexiva de Lampa
Nota de prensaRosenda Cutipa tiene el objetivo de inculcar el quechua y las tradiciones de Puno.




30 de noviembre de 2024 - 8:59 a. m.
A más de 3,800 metros sobre el nivel del mar, en “La ciudad rosada” de Lampa (Puno), encontraremos a Rosenda Cutipa Paricoto, una mujer de 67 años que está haciendo realidad su más profundo sueño: inculcar el quechua y las tradiciones de su departamento a las nuevas generaciones “para que no pierdan su identidad cultural y el amor por su tierra”.
Dueña de una mirada fuerte y noble sonrisa, Rosenda Filomena es reconocida como una de las voces más importantes de su localidad. Empezó muy joven en las emisoras de su distrito, difundiendo su lengua originaria y defendiendo los derechos de las personas más vulnerables, como los adultos mayores. A sus 67 años, continúa compartiendo reflexiones en su programa radial “Pacha Rigch’ariy”.
La sexagenaria evocó los momentos que compartía con sus padres, Florencio Cutipa y Petronila Paricoto, como las jornadas en la cooperativa Chañocahua, donde tenía que contar y vigilar constantemente a las ovejas del lugar. “También aprendí algunos secretos de la ganadería y textilería”, sostuvo.
La sabia de Puno nació el 1 de marzo de 1957 en la comunidad campesina de Ccatacha (Lampa) y a pesar de los pocos recursos que tenía su familia, aprendió a el valor del trabajo y cómo sobrellevar los problemas que se presentan en la vida. Como ejemplo de ello, confesó que nada la detuvo para terminar el colegio. “Con 8 años, ayudaba a mis padres y empecé a estudiar en la Escuela N°70422”, detalló.
Rosenda nunca se rindió a pesar de las adversidades y aunque vivió momentos sumamente complicados, solo le quedó levantarse, mirar hacia adelante y seguir, dejando atrás el miedo a lo desconocido.
Cuando cumplió 20 años conoció a Martín Pacco, el hombre con quien tuvo tres hijos y que en un momento juró amarla “en las buenas y en las malas”. Lamentablemente, las palabras se las llevó el viento y las muestras de cariño se convirtieron en ofensas, ataques y humillaciones. Fue así que una tarde, cuando el sol aún no se ocultaba, Filomena observó a sus pequeños y con una gran determinación decidió separarse de su esposo.
Cutipa Paricoto se aferró a su fe y al incondicional amor que tenía por sus niños. Trabajó día y noche por el futuro de sus pequeños, hasta que un día crecieron y la apoyaron. Su perseverancia rindió frutos, Rosenda encontró paz, se incorporó al programa Pensión 65 y aprovechó sus conocimientos para convertirse en maestra de quechua de los escolares de su localidad. Producto de su incansable esfuerzo, recientemente el Ministerio de la Mujer le entregó el reconocimiento “Mayores del Bicentenario”, como resultado del aporte cultural que ha generado en su región al convertirse en la voz ancestral de Lampa.
Emblema Puno
Rosenda se mostró muy emocionada por el reconocimiento “Mayores del Bicentenario”, pero no fue la única distinción que recibió. Pensión 65 también destacó su rol como ejemplo y emblema de Puno, por su lucha y contribución para fortalecer la identidad cultural de su región. “Estoy muy contenta de recibir este recordatorio”, manifestó. Cabe precisar que su testimonio llegó a ser plasmado en el libro “Mujeres de mi tierra: 25 historias de vida”.
Puno, 30 de noviembre de 2024
Dueña de una mirada fuerte y noble sonrisa, Rosenda Filomena es reconocida como una de las voces más importantes de su localidad. Empezó muy joven en las emisoras de su distrito, difundiendo su lengua originaria y defendiendo los derechos de las personas más vulnerables, como los adultos mayores. A sus 67 años, continúa compartiendo reflexiones en su programa radial “Pacha Rigch’ariy”.
La sexagenaria evocó los momentos que compartía con sus padres, Florencio Cutipa y Petronila Paricoto, como las jornadas en la cooperativa Chañocahua, donde tenía que contar y vigilar constantemente a las ovejas del lugar. “También aprendí algunos secretos de la ganadería y textilería”, sostuvo.
La sabia de Puno nació el 1 de marzo de 1957 en la comunidad campesina de Ccatacha (Lampa) y a pesar de los pocos recursos que tenía su familia, aprendió a el valor del trabajo y cómo sobrellevar los problemas que se presentan en la vida. Como ejemplo de ello, confesó que nada la detuvo para terminar el colegio. “Con 8 años, ayudaba a mis padres y empecé a estudiar en la Escuela N°70422”, detalló.
Rosenda nunca se rindió a pesar de las adversidades y aunque vivió momentos sumamente complicados, solo le quedó levantarse, mirar hacia adelante y seguir, dejando atrás el miedo a lo desconocido.
Cuando cumplió 20 años conoció a Martín Pacco, el hombre con quien tuvo tres hijos y que en un momento juró amarla “en las buenas y en las malas”. Lamentablemente, las palabras se las llevó el viento y las muestras de cariño se convirtieron en ofensas, ataques y humillaciones. Fue así que una tarde, cuando el sol aún no se ocultaba, Filomena observó a sus pequeños y con una gran determinación decidió separarse de su esposo.
Cutipa Paricoto se aferró a su fe y al incondicional amor que tenía por sus niños. Trabajó día y noche por el futuro de sus pequeños, hasta que un día crecieron y la apoyaron. Su perseverancia rindió frutos, Rosenda encontró paz, se incorporó al programa Pensión 65 y aprovechó sus conocimientos para convertirse en maestra de quechua de los escolares de su localidad. Producto de su incansable esfuerzo, recientemente el Ministerio de la Mujer le entregó el reconocimiento “Mayores del Bicentenario”, como resultado del aporte cultural que ha generado en su región al convertirse en la voz ancestral de Lampa.
Emblema Puno
Rosenda se mostró muy emocionada por el reconocimiento “Mayores del Bicentenario”, pero no fue la única distinción que recibió. Pensión 65 también destacó su rol como ejemplo y emblema de Puno, por su lucha y contribución para fortalecer la identidad cultural de su región. “Estoy muy contenta de recibir este recordatorio”, manifestó. Cabe precisar que su testimonio llegó a ser plasmado en el libro “Mujeres de mi tierra: 25 historias de vida”.
Puno, 30 de noviembre de 2024
Unidad de Comunicación e Imagen
Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65
Esta noticia pertenece al compendio Historias Que Nos Unen