Gobierno apuesta por un nuevo enfoque de diálogo para el desarrollo territorial

En el Perú existen grandes proyectos de inversión que generan abundante riqueza, pero alrededor de ellos se generan conflictos cuyo origen se relaciona con que los proyectos no le han cambiado la vida a la gente, no han generado desarrollo en las comunidades territoriales alrededor de esos proyectos, principalmente debido al enfoque con el que se ha venido trabajando por años, manifestó el viceministro de Gobernanza Territorial de la Presidencia del Consejo de Ministros, Raúl Molina, durante su presentación en la Mesa “Del conflicto a la sostenibilidad social”.

Durante los últimos quince años se han creado mesas de diálogo, se han firmado cientos de actas y se han asumido miles de compromisos que, en gran parte, han sido recibidos como herencia por el actual gobierno, que se ve en la obligación de gestionarlos. Esos compromisos contienen las expectativas y frustraciones de esas poblaciones, y su incumplimiento ha generado mucha desconfianza, agregó Molina durante su exposición.

Esta desconfianza no permite que pueda existir un diálogo horizontal entre los diversos actores y lo que necesitamos es hacerle entender a las personas que lograr sus expectativas y los compromisos es una tarea conjunta de los actores del desarrollo y que ese cumplimiento requiere de esfuerzos persistentes de seguimiento tanto del Estado como de las poblaciones involucradas, enfatizó.

En ese sentido, el gobierno aspira a construir una relación nueva y de largo plazo entre el Estado, empresas privadas y comunidades territoriales. En la misma línea de lo expresado por el Señor Presidente de la República, Martín Vizcarra, durante su presentación en la Cumbre Minera, Molina afirmó que para que puedan ejecutarse, los proyectos mineros deben superar el reto social, además de los retos precedentes técnico, financiero y ambiental, porque mientras el Estado y la empresa no garanticen resultados de desarrollo territorial en los lugares de explotación de recursos naturales, no generarán la confianza necesaria en las autoridades y la población de esos territorios.

Este nuevo enfoque, que incorpora el concepto de procesos de diálogo para el desarrollo, permitirá tratar de manera integral las necesidades y demandas de las poblaciones, la incorporación de nuevos actores y fortalecer la confianza en el Estado, tal como está sucediendo en las provincias de Cotabambas, Chumbivilcas, Paruro y Espinar, en donde se han venido generando importantes consensos con la intervención del Ejecutivo en diálogo con autoridades y representantes de esas provincias.

Finalmente, el viceministro Molina comentó que tal como lo había explicado con anterioridad el Presidente del Consejo de Ministros, Salvador del Solar, serán necesarios ajustes normativos que nos ayuden a lograr que esos procesos compartidos de construcción de bienestar lleguen de manera eficiente a las comunidades.