Condiciones para el Debate: La necesidad de una Ley de Partidos Políticos por: Fernando Tuesta Soldevilla (diario El Comercio)
Nota de prensa5 de setiembre de 2003 - 12:00 a. m.
No se puede buscar la gobernabilidad y tener una valla baja de ingreso al sistema de partidos Se esta debatiendo en estos dias los temas que involucran una futura ley de partidos políticos. En realidad, se hace referencia al dictamen de la comision de Constitucion que sera debatido por el pleno. Se pone en marcha, asi, el proceso final que ya tiene mas de un Año y que ha involucrado a muchas instituciónes y profesionales. Por lo tanto la condicion primera es que exista voluntad politica para aprobar esta ley. El primer proyecto presentado en el Congreso ya ha cumplido dos decadas, y a el le han sobrevenido varios mas a lo largo de este tiempo. En el pasado, no existia una voluntad de los partidos políticos, particularmente en la decada anterior, por el temor al control gubernamental. Hoy, sin embargo, se toca el tema con frecuencia y hasta ha madurado la necesidad de una ley de esta naturaleza, que involucra como condicion esencial la participacion y voluntad de los partidos políticos, pues ellos son sensibles a los medios y a la opinion publica. Una segunda condicion es que su aprobacion cuente con el mayor consenso posible. No se habla de unanimidad, sino de consenso. La firma de todos los grupos políticos en el dictamen asegura de alguna manera que la norma perdure. De lo contrario, si se aprobara con estrecha mayoria, la nueva ley estaria condenada a que en un cambio de relaciones de fuerza partidaria, se la someta a modificaciones inmediatas, que no son buenas para la salud democratica. Una tercera condicion tiene que ver con crear reales expectativas. Una ley no arregla los problemas de nuestros partidos políticos, pero si crea las condiciones para una vida reglada y un espacio de participacion ciudadana. Obviamente, una ley de esta naturaleza afectaria la vida partidaria al dotarla de mejores condiciones, pero tambien mayores exigencias. Finalmente, se trata de competir por el poder, que reporta luego una responsabilidad publica. Una cuarta condicion tiene que ver con la responsabilidad. Para que este debate sea de buena calidad, es necesario que se lea con atencion el dictamen de la Comision de Constitucion que tiene 44 articulos agrupados en 5 titulos. Esto que parece de sentido comun, no se observa en la realidad, pues es comun oir hablar del dictamen sin conocerlo. Esto enturbia cualquier debate, como el ocurrido con el informe de la CVR. Muchos opinan y pocos han leido tan importante y delicado informe. Una quinta condicion tiene que ?ver con el conocimiento. Es necesario que quienes intervengan en el debate conozcan que se puede y debe colocar en una ley de partidos políticos. Aqui es donde uno encuentra el lado oscuro del conocimiento. Por ejemplo, no es cierto que el Perú sea el unico pais que no tiene ley de partidos políticos en America Latina, como tantas veces se repite. Lo que si es cierto es que todos los paises de la region, salvo Venezuela, reciben financiamiento publico ya sea directo o indirecto. Basicamente una legislacion sobre partidos políticos debe de abordar la fundacion/extincion de agrupaciones, asi como su democracia interna y financiamiento. Una sexta condicion es que la ley debe ser coherente. Esto que parece obvio, tampoco lo es. Por ejemplo, no se puede buscar la gobernabilidad y tener una valla baja de ingreso al sistema de partidos. No se puede pretender un control sobre los recursos de manera eficiente, si se mantiene el voto preferencial y las listas locales. O no se puede ser exigente con los que estan fuera del sistema y permitir que los que esten dentro no compitan en todos los procesos electorales. Si el debate contiene estas condiciones estariamos delante de un escenario con resultados presumiblemente acertados para que los tantas veces criticados partidos políticos, adecuen sus dinamicas a relaciones internas y externas enteramente democraticas. FERNANDO TUESTA SOLDEVILLA Politologo