Municipalidad cierra locales nocturnos por perturbar la tranquilidad de los vecinos

Gracias a las políticas públicas del alcalde provincial de Trujillo, Mario Reyna para recuperar el orden en la ciudad, la Subgerencia de Operaciones de Fiscalización realizó un operativo inopinado, el fin de semana, para sancionar a los centros de diversión nocturna que no cumplen con los requisitos para poder funcionar.

Como resultado de las acciones de control de los funcionarios municipales, se sancionaron a cuatro locales con clausuras temporales de 30 días calendarios por no cumplir con las normas municipales.

Los centros de diversión D’Juerga y Dakiti, ubicados en la urbanización Monserrate, frente a la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO) y el Salón de Billas Club D’Kavi, situado en la primera etapa de la urbanización San Andrés, fueron sorprendidos vendiendo bebidas alcohólicas en sus instalaciones, lo que confirmó que realizaban actividades distintas a las autorizadas en sus licencias de funcionamiento.

Además, los locales cerrados se ubican en zonas urbanas y generaban excesivos ruidos, que generaban incomodidad entre los vecinos.

En tanto, un cuarto local que funcionaba como licorería con el nombre de Market ChapaTuShot, ubicado en la avenida Juan Pablo II, en la urbanización San Andrés fue cerrado por no contar con certificado de Inspección Técnica de Seguridad en Edificaciones (ITSE).

El alcalde, Mario Reyna pidió a los propietarios de los centros de diversión nocturna a acatar la Ordenanza Municipal N.° 046-2024-MPT, que establece nuevas reglas para la venta y consumo de bebidas alcohólicas en Trujillo.

La norma, impulsada por la actual gestión, fija como horario máximo de funcionamiento de discotecas, bares y similares, de 7:00 p.m. a 1:00 a.m., todos los días de la semana.

Además, exige que los locales cuenten con aislamiento acústico adecuado para evitar ruidos molestos y prohíbe el uso de veredas y áreas verdes como estacionamientos.