Familiares y autoridades agradecen trabajo del Ministerio de Defensa y la Marina en rescate de pescadores
Nota de prensaMarina de Guerra refuerza acciones preventivas tras exitoso rescate de pescadores en Pisco
11 de junio de 2025 - 9:08 p. m.
Familiares de los diez pescadores lambayecanos que fueron rescatados este martes frente a la costa de Pisco destacaron la intervención del Ministerio de Defensa, a través de la Marina de Guerra, en las acciones de búsqueda y localización de la embarcación “Ethel Mercedes IV”, que estuvo a la deriva durante varios días.
“Gracias a Dios y a la Marina, nos apoyaron, buscaron junto con nosotros. Nos comunicábamos constantemente. Fue un trabajo en conjunto que hoy agradecemos con todo el corazón”, expresó Jaime Acosta García, familiar de pescadores que también fue protagonista del operativo de búsqueda.
Desde Lambayeque, la alcaldesa del distrito de San José, Shirley Castañeda Sánchez, acompañó personalmente a los parientes de los tripulantes hasta Lima y destacó el respaldo recibido por parte del sector Defensa, reflejado en una reunión de Defensa, Walter Astudillo Chávez, para intensificar los esfuerzos de localización previo al milagroso rescate.
“El ministro nos atendió de inmediato, gestionó la intensificación de la búsqueda y acompañó a la Capitanía del Callao para acelerar los vuelos de exploración. No fue un trabajo a medias; se activaron todas las rutas posibles: aérea, marítima y con apoyo de la comunidad”, declaró.
Marinos, familias y autoridades: una sola misión
La coordinación y esfuerzo conjunto entre la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (Dicapi), la Capitanía de Puerto de Pisco, pescadores de la zona y los familiares permitió trazar nuevas rutas de búsqueda que llevaron finalmente a la ubicación de la embarcación. Un avión Beechcraft B-200 y patrulleras de superficie también participaron activamente en el rastreo.
El señor Jaime Acosta García fue clave en la ubicación final. “Nosotros seguimos, porque sabíamos que los íbamos a encontrar. Cuando vimos su lancha, lloramos de alegría. Nos reconocieron de lejos: ‘ahí vienen mis tíos, ahí vienen mis hermanos’. Fue un milagro”, relató.
Afortunadamente todos los tripulantes se encontraban en buen estado de salud, contaban con provisiones básicas y habían quedado a la deriva debido a una falla mecánica. Tras ser hallados, fueron escoltados rumbo a tierra firme para reencontrarse con sus familias y cumplir las diligencias correspondientes ante la Capitanía del Callao.
A su turno, el jefe del Estado Mayor de la Comandancia de Operaciones de Guardacostas, Capitán de Navío Carlos Díaz Honores, subrayó que cada búsqueda de emergencia realizada por la Marina se ejecuta con el mayor profesionalismo, con el objetivo de reunir nuevamente a las familias con sus seres queridos.
“La satisfacción es grande. Nuestra misión es esa. Nuestra razón de ser es salvaguardar la vida de las personas. No se escatiman medios ni recursos para lograr que vuelvan con sus familiares”, aseguró.
Con estas acciones de rescate lideradas por la Marina de Guerra, el Ministerio de Defensa reafirma su compromiso con la seguridad marítima y el acompañamiento a las comunidades del litoral, especialmente ante emergencias que ponen en riesgo vidas humanas. Este rescate refleja un trabajo articulado y humano entre las Fuerzas Armadas, autoridades locales y familias de pescadores.
“Gracias a Dios y a la Marina, nos apoyaron, buscaron junto con nosotros. Nos comunicábamos constantemente. Fue un trabajo en conjunto que hoy agradecemos con todo el corazón”, expresó Jaime Acosta García, familiar de pescadores que también fue protagonista del operativo de búsqueda.
Desde Lambayeque, la alcaldesa del distrito de San José, Shirley Castañeda Sánchez, acompañó personalmente a los parientes de los tripulantes hasta Lima y destacó el respaldo recibido por parte del sector Defensa, reflejado en una reunión de Defensa, Walter Astudillo Chávez, para intensificar los esfuerzos de localización previo al milagroso rescate.
“El ministro nos atendió de inmediato, gestionó la intensificación de la búsqueda y acompañó a la Capitanía del Callao para acelerar los vuelos de exploración. No fue un trabajo a medias; se activaron todas las rutas posibles: aérea, marítima y con apoyo de la comunidad”, declaró.
Marinos, familias y autoridades: una sola misión
La coordinación y esfuerzo conjunto entre la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (Dicapi), la Capitanía de Puerto de Pisco, pescadores de la zona y los familiares permitió trazar nuevas rutas de búsqueda que llevaron finalmente a la ubicación de la embarcación. Un avión Beechcraft B-200 y patrulleras de superficie también participaron activamente en el rastreo.
El señor Jaime Acosta García fue clave en la ubicación final. “Nosotros seguimos, porque sabíamos que los íbamos a encontrar. Cuando vimos su lancha, lloramos de alegría. Nos reconocieron de lejos: ‘ahí vienen mis tíos, ahí vienen mis hermanos’. Fue un milagro”, relató.
Afortunadamente todos los tripulantes se encontraban en buen estado de salud, contaban con provisiones básicas y habían quedado a la deriva debido a una falla mecánica. Tras ser hallados, fueron escoltados rumbo a tierra firme para reencontrarse con sus familias y cumplir las diligencias correspondientes ante la Capitanía del Callao.
A su turno, el jefe del Estado Mayor de la Comandancia de Operaciones de Guardacostas, Capitán de Navío Carlos Díaz Honores, subrayó que cada búsqueda de emergencia realizada por la Marina se ejecuta con el mayor profesionalismo, con el objetivo de reunir nuevamente a las familias con sus seres queridos.
“La satisfacción es grande. Nuestra misión es esa. Nuestra razón de ser es salvaguardar la vida de las personas. No se escatiman medios ni recursos para lograr que vuelvan con sus familiares”, aseguró.
Con estas acciones de rescate lideradas por la Marina de Guerra, el Ministerio de Defensa reafirma su compromiso con la seguridad marítima y el acompañamiento a las comunidades del litoral, especialmente ante emergencias que ponen en riesgo vidas humanas. Este rescate refleja un trabajo articulado y humano entre las Fuerzas Armadas, autoridades locales y familias de pescadores.