Guardaparques peruanos: una Navidad al cuidado de nuestra Madre Tierra

Nota de prensa
Conoce el testimonio de aquellas personas que trabajan incansablemente para salvaguardar las áreas naturales protegidas y la biodiversidad de nuestro país.
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25 de diciembre de 2023 - 6:00 a. m.

Lima.- Mientras la mayoría de las personas disfrutan de la Navidad en sus hogares, rodeados de sus seres queridos, hay un grupo de personas que trabaja incansablemente para proteger la Madre Tierra y la biodiversidad de nuestro país: las y los guardaparques, quienes dedican su vida a velar por la conservación de nuestros bosques, ríos, montañas y playas que forman parte de nuestras áreas naturales protegidas.

Durante la Navidad, los guardaparques están alertas ante cualquier amenaza, como la caza furtiva, la tala ilegal o los incendios forestales. Su labor es fundamental para garantizar que las futuras generaciones puedan disfrutar de la riqueza natural del Perú.

En reconocimiento a esa sacrificada labor presentamos los testimonios de Kerly Castillo y Felipe Landeon, dos valerosos guardaparques del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), del Ministerio del Ambiente.

Navidad es amar la naturaleza

Kerly es guardaparque desde hace ocho años y cuenta que le ha  tocado pasar la Navidad junto a dos colegas de brigada en la Reserva Nacional de Lachay, ubicada en el distrito de Huacho, provincia de Huaura, en Lima. “La Navidad, aquí en la Reserva se siente muy tranquila, nostálgica y solitaria. Con mis compañeros de trabajo nos saludamos en la medianoche, cenamos y luego proseguimos con nuestra labor. No es lo mismo que pasarla en familia”, acota.

Esa experiencia le hace reflexionar sobre su trabajo. “Ese sacrificio vale la pena, pues estamos cuidando que nuestra flora y la fauna no sean afectados”, subraya Kerly, quien, por ahora -precisa- solo está comprometida con la naturaleza. “La Navidad es amor a la familia y a la Madre Tierra. Es confraternizar con lo que se tenga”, subraya.

Su mística por el trabajo le hace sentirse privilegiada por el hecho de pasar las fiestas navideñas en un área natural, donde -según afirma- disfruta de la conexión con la naturaleza, ya que no existen los estresantes ruidos de la ciudad ni mucho menos de los fuegos artificiales que perturban, mayormente,  a los animales.

Mientras prepara sus implementos para entrar a la guardia y tras las oraciones para que tenga una buena jornada, Kerly siempre recuerda su importante misión: proteger y conservar los espacios naturales, que son refugio de diferentes especies de flora y fauna. “Los guardaparques amamos a nuestras familias y también amamos nuestro trabajo”, resalta.

El oso de la Navidad

Eran las primeras horas de la mañana del 26 de diciembre de 2021, cuando Felipe patrullaba a pie una zona del Bosque de Protección Pui Pui en la región Junín. Toda la jornada del día anterior fue tranquila hasta que en una parte del camino él y su colega de brigada se encontraron frente a frente con un oso de anteojos.

“No tuve forma de reaccionar, me quedé paralizado por el temor, ya que es un animal silvestre y no se sabe cómo reaccionan ante la presencia humana. Felizmente, el oso siguió su camino y solo pasé un gran susto”, comenta Felipe, recordando que en 2019, justo un 25 de diciembre, encontró huellas de osos de anteojos en los troncos de los árboles, lo que le hacía sospechar que por algún sitio estaba escondido.

Desde que entró a trabajar en el Sernanp, hace 6 años, siempre le tocó laborar en Navidad, pero este año, que fue destacado al Santuario Nacional Pampa Hermosa, de Junín, volverá a celebrar dicha festividad junto con su esposa y sus cinco hijas; sus padres y hermanos.

Recuerda que cuando le ha tocado laborar es fiestas de Navidad y salir de su casa para internarse por semanas en el área natural que le correspondía, se despedía de su esposa pidiéndole que entregue los regalos y les transmita el amor por sus hijas.

Mientras ocurría esta entrevista vía telefónica, se escuchaba el trinar de las aves del bosque. Con esa cortina de música natural, Felipe comenta que la Navidad de un guardaparque es caminar por los senderos. “Sin teléfono ni panetón. Todo pasa normal, nos abrazamos entre compañeros, deseándonos lo mejor para nuestras familias. Estamos siempre en alerta cumpliendo nuestra labor”, expresa.

Reconocimiento al valioso trabajo

Recientemente, el Congreso de la República aprobó la Ley n.° 5755, que crea la Ley del Cuerpo de Guardaparques del Perú. Esta norma simboliza un gran paso en la defensa de los derechos de los cerca de 800 mujeres y hombres que dedican su esfuerzo en la conservación de nuestro patrimonio natural y contribuyen al desarrollo sostenible de las poblaciones que viven en el ámbito de las 76 áreas naturales protegidas (ANP).

Su labor (guardaparques y especialistas), en articulación con las comunidades locales y organizaciones privadas, ha permitido que actualmente dichos territorios tengan un 96 % de buen estado de conservación.

Con esta norma legal se busca profesionalizar la labor que cumplen como actores estratégicos en la protección de la diversidad biológica y cultural del país, considerando las cualidades distintivas del personal guardaparque, a fin de proteger sus derechos y regular los aspectos referidos a sus funciones.