Conoce la historia de Olga Canta: la recicladora que te entrega una flor a cambio de tus residuos

A bordo de su motocar, Olga Canta comienza su jornada diaria de trabajo desde muy temprano. Y en esta época de pandemia por la COVID-19, se coloca cuidadosamente los equipos de protección personal que le da la municipalidad de su distrito, a fin de proteger su salud y la de sus hijos que la esperan en casa.

Olga es una recicladora formal del distrito de Villa María del Triunfo y preside la Asociación de Recicladores “Las Palmeras”. Tiene más de 13 años dedicándose a esta labor, y en estos tiempos de emergencia sanitaria ha continuado realizando su trabajo de forma ininterrumpida.

“El año pasado, apenas se reactivó el reciclaje en el distrito, volvimos a nuestras actividades, siguiendo todos los protocolos sanitarios. Nosotros no podemos parar, de esto vivimos”, comenta.

Ella no toca las puertas de los hogares con las manos vacías, pues, en coordinación con la comuna distrital, entrega incentivos como abono orgánico, flores o plantas ornamentales a los pobladores que colaboran con ella y participan en el programa de reciclaje del distrito. “Regalando estas plantas se acuerdan más de nosotros. Desde los hogares siempre nos apoyan con sus bolsas de residuos, pero necesitamos que se inscriban más familias”, afirma.

Hace unos días, le tocó visitar la zona de José Carlos Mariátegui, conformada por más de 200 asentamientos humanos y que representa casi el 35 % de la población del distrito. Casa por casa, y bajo el sofocante calor del verano, Olga realiza su arduo trabajo con optimismo y entusiasmo, recibiendo los residuos sólidos y cumpliendo estrictamente los protocolos de bioseguridad.

Ella no está sola. En su tarea de reciclaje va acompañada de Elida, una promotora ambiental que también lleva muchos años colaborando con la gestión ambiental del distrito. Juntas forman un buen equipo, reciclando y empadronando a cada uno de los hogares, además de capacitar a los responsables de las familias sobre la correcta segregación de residuos desde la casa. “Juntas nos apoyamos y salimos día a día. Estamos luchando en favor del medio ambiente”, dice Olga.

Son casi las 2 de la tarde de un día soleado en Villa María del Triunfo y el motocar de Olga ya está lleno de material reciclado. Buena jornada, dice, mientras seca el sudor de su rostro.

Es hora de ir al Punto de Acopio Municipal para realizar el pesaje y la valorización de los residuos recolectados. De ahí se obtienen insumos para diversas empresas que elaboran productos a partir de estos tipos de residuos, contribuyendo así con el circuito de la economía circular.

Luego de esta intensa jornada, Olga va a su casa para unirse con sus hijos y disfrutar un momento de unión familiar.

Al día siguiente, regresa a su tarea diaria. Un claro ejemplo de fortaleza y de convicción por un Perú cada vez más limpio.