Ministra Gloria Montenegro: “El gran desafío para América Latina y el Caribe es vencer la desigualdad”
Nota de prensa
Fotos: MIMP
26 de abril de 2019 - 8:49 a. m.
La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), Gloria Montenegro Figueroa, señaló que el gran desafío para los países de la región de América Latina y el Caribe, es vencer a la desigualdad que se refleja en el rostro de las personas más indefensas.
“El gran desafío para el Consenso de Montevideo y la Agenda 2030 Caribe sigue siendo, sin ninguna duda, el de la discriminación, que se expresa –por ejemplo- en la alta fecundidad en adolescentes, mucha mayor de la prevista a la luz de la evolución de sus indicadores demográficos y socioeconómicos”, dijo.
Montenegro Figueroa participa en la “Tercera reunión del foro de los países de América Latina y el Caribe sobre el desarrollo sostenible”, en su condición de Presidenta de la Conferencia Regional de América Latina y el Caribe 2018-2010, organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Durante su encuentro con otras lideresas y líderes, indicó que los países de la región se encontraban en fase de desarrollo y consolidación de mecanismos institucionales para la implementación de la Agenda 2030, que engloba los principales retos y desafíos planteados.
La titular del MIMP, Gloria Montenegro, comentó los desafíos de la Conferencia Regional sobre Población y Desarrollo de América Latina y el Caribe. Asimismo, compartió con las y los asistentes distintas experiencias y prácticas para el seguimiento del cumplimiento de los objetivos trazados en la Agenda 2030 para América Latina y el Caribe y Europa.
“Hay una clara desventaja de la población rural en la mayoría de los indicadores sociales. La segregación urbana desencadena la existencia de bolsones de pobreza y desigualdades en el acceso a la vivienda, a los servicios públicos y a una adecuada infraestructura urbana”, mencionó.
En cuanto al bienestar de la población adulta mayor, dijo que se realizan esfuerzos para responder a las demandas de una población en rápido proceso de envejecimiento.
Los pueblos indígenas y afrodescendientes cuentan con un denominador común: ellos experimentan mayores niveles de pobreza material y exclusión.
Entre los retos relacionados a la desigualdad de género el más crítico es el de la violencia de género; problemática grave y extendida, que persiste pese a la mayor visibilidad pública y a la creciente movilización ciudadana en los últimos años.
Los desafíos relacionados a las migraciones en la región, incluido el flujo de menores de edad no acompañados, se han venido intensificando.