Internos del penal Huacho que realizan labores productivas asumen sustento económico de sus hijos

NOTA DE PRENSA N° 506-INPE-2023
Quinientos catorce internos, de 1955, del Establecimiento Penitenciario Huacho se dedican a labores productivas, de ellos un 90% son padres de menores de edad y la venta de sus productos les permite contribuir con el sustento económico de sus vástagos.

Carlos Joel Salvador Chafalote, padre de tres niños, trabaja en el taller de cerámica, su proceso judicial por robo agravado se encuentra en revisión; sin embargo, desde que ingresó, hace cinco años, ha decidido trabajar “por mis hijos, mi familia y porque cuando trabajo los días se pasan rápido, los extraño mucho a mis hijos”, agregó.

Su buena conducta le ha permitido progresionar en el tratamiento penitenciario, por ello se encuentra recluido en el pabellón 5 de mínima seguridad.

“He perdido muchos años de compartir con mis hijos, si tuviera que retroceder en el tiempo no cometería el delito por el que estoy aquí (penal), solo me ha traído tristeza de no ver a mis hijos”, cuenta Oscar Caldas Mejía, de 60 años de edad, que lleva 11 años recluido por el delito de tráfico ilícito de drogas y desde hace 9 años trabaja en el taller de cestería “lo que gano lo mando a mi familia, para mis dos menores hijos”.

Desde hace un año, en el taller de cueros trabaja Dennis Hugo Oré Villalobos, de 24 años de edad, padre de dos niños, reconoce haber cometido el delito de robo agravado y se arrepiente de su mala decisión “quisiera retroceder el tiempo, pero ya no es posible”, su mayor dolor fue recibir la llamada telefónica de su hija de 5 años preguntándole si estaba en la cárcel “me quedé mudo, avergonzado y lloré, solo le dije que me perdone, he decidido trabajar, por ellas, por mis hijas” puntualizó, el joven interno.

Estos tres casos son la muestra de un grupo de internos que son impulsados a realizar labores productivas y obtener ingresos económicos para el sustento de sus hijos.

En el área de trabajo, dirigido por Juan Torres Sánchez, trabajan cinco servidores del INPE que se encargan de supervisar la labor de los internos en diez talleres en las especialidades de confección textil, zapatería, cuero, cerámica, cestería, panadería, entre otros.