El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) como parte del tratamiento penitenciario fomenta la importancia del libro y de la lectura en los penales a escala nacional.
Se desarrolló la campaña “Lectura Compartida” #DedicaUnLibroyDónalo, que recolectó más de 2500 volúmenes que han sido distribuidos en las bibliotecas de diversos penales para mejorar su oferta literaria y beneficiar a internos e internas.
Los establecimientos penitenciarios también recibieron donativos de instituciones públicas y privadas y de voluntarios comprometidos con la resocialización.
Penal Virgen de Fátima
Se inauguraron 5 bibliotecas anexas en los pabellones, que facilitarán a las internas el acceso a la lectura como parte del tratamiento penitenciario.
Las bibliotecas llevan el nombre como homenaje póstumo de la Dra. Bertha Chacaltana Condori, ex directora de la Oficina Regional Lima. En la ceremonia de inauguración participó su hija Estefani Chacaltana, quien destacó el compromiso que tuvo su madre con la resocialización.
Penal de Quillabamba
El penal de Quillabamba reinauguró su biblioteca "Inca Garcilaso de la Vega", con una amplia oferta literaria y un nuevo ambiente, que permitirá un mejor acceso a sus instalaciones, con el cumplimiento de las medidas de bioseguridad.
El director del penal, Julio Meniz Grados, indicó que se recibieron 200 libros que fueron recolectados en la campaña, del INPE, “Lectura Compartida” #DedicaUnLibroyDónalo, y una importante donación de la Municipalidad Provincial de La Convención, con la que incrementaron su variedad de textos.
Penal Mujeres Chorrillos
En el penal de Mujeres Chorrillos, se dio inició al ciclo de bibliotecas rodantes, en la que cada mañana, un grupo de internas hace un recorrido por cada pabellón para brindar libros en calidad de préstamo a las interesadas.
La actividad es promovida por el CETPRO (Centro de Educación Técnico Productivo) María Parado de Bellido que cuenta con la biblioteca “Manuel Scorza” implementada con 5069 libros.