Estudio revela alto peligro por huaicos en zona urbana de Chaclacayo

Nota de prensa
Un informe técnico del Ingemmet advierte que más del 90% del área urbana de Cusipata está asentada sobre una zona de alto peligro por flujos de detritos, conocidos popularmente como huaicos.
Vista panorámica del lugar
Personal del Ingemmet inspeccionando la zona
Personal del Ingemmet inspeccionando la zona sobre una roca

7 de mayo de 2025 - 12:54 p. m.

El 16 de marzo de 2023, los vecinos de Cusipata en Chaclacayo vivieron una madrugada que no olvidarán. Un estruendo se escuchó por la quebrada y, en cuestión de minutos, toneladas de lodo, rocas y agua, afectaron calles y viviendas, asentadas en la desembocadura de la quebrada; además de 15 kilómetros de la Carretera Central, llegando hasta el distrito de Ate.

Ante este suceso, en los meses siguientes, especialistas Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet) realizaron una evaluación detallada de la quebrada Cusipata, ubicada en el distrito de Chaclacayo, Lima. Su objetivo: comprender las condiciones que dieron lugar a ese evento y actualizar la cartografía de peligros por flujos(huaicos), que exponen y ponen en riesgo a las poblaciones y viviendas de la zona urbana de Cusipata.


Una geografía predispuesta al peligro
La quebrada Cusipata se ha emplazado sobre rocas intrusivas (principalmente tonalitas y dioritas) que pertenecen a la Super Unidad Santa Rosa. Estas rocas, aunque resistentes en apariencia, presentan una estructura muy fracturada y una resistencia baja (25 a 50 megapascales), según el estudio de Ingemmet. Dichas características geotécnicas contribuyen a la generación de materiales sueltos, predispuesto a ceder con el paso del agua.

A esto se suman las características del relieve: montañas con pendientes muy fuertes de entre 25° y 45°, y zonas donde esa inclinación se supera ampliamente. Estas laderas están cubiertas por suelos sueltos, acumulaciones de sedimentos llamados “material detrítico”, arrastrados por lluvias intensas de eventos pasados.


Una historia que se repite
La historia del huaico de 2023 no es la primera. En el informe del Ingemmet, se hace un recuento de estos eventos históricos, periódicos y recurrentes de flujos de detritos ocurridos en Cusipata, todos detonados por lluvias extraordinarias, muchas veces relacionadas con el fenómeno El Niño o eventos similares.

Además del entorno natural peligroso, el crecimiento urbano desordenado ha agravado la situación. Muchas viviendas, en un total del 90% del área urbana de Cusipata, se han levantado en el cauce mismo de la quebrada, hacia la parte baja donde estos flujos desembocan, reduciendo su capacidad para canalizar el agua. Esto convierte a Cusipata en una Zona Crítica y de Peligro Alto ante nuevos huaicos.


¿Qué se puede hacer?
Ingemmet no solo ha identificado el problema, también ha propuesto soluciones urgentes como construir barreras dinámicas y diques transversales para frenar el material que baja por las laderas; limpiar el cauce de la quebrada con regularidad; y levantar defensas ribereñas que protejan a las zonas habitadas.
Además, se recomienda implementar un Sistema de Alerta Temprana (SAT) con sensores y alarmas que puedan avisar a la población con tiempo ante la posibilidad de un huaico.

Finalmente, se debe manifestar que lo más importante es que las autoridades eviten nuevas construcciones en zonas vulnerables y desarrollen campañas de concientización, preparación y participación de la población, frente a los peligros y riesgos a los que están expuestos y vulnerables. El huaico del 2023, nos advierte del peligro y fragilidad social en Cusipata.