DOS NIÑOS CON DISCAPACIDAD RESIDENTES DEL CAR ESPERANZA RECIBIERON EL SACRAMENTO DEL BAUTIZO

En el marco de las celebraciones por el segundo aniversario del Centro de Atención Residencial (CAR) Esperanza, del INABIF, dos residentes con discapacidad física y mental, recibieron el sagrado sacramento del bautizo en la parroquia del Hospital Geriátrico de la Policía Nacional San José que se ubican frente a este hogar de San Miguel.

Se trata de la niña de siglas M.E.S.M, de seis meses de edad, que tuvo como padrinos a Iván Ramírez y Consuelo Flores, integrantes de la empresa proveedora de gas natural Nagasco. También, el niño de siglas A.T.L., de 4 años, de edad que fue apadrinado por Roxana Bacalla y Gerson Durand, este último director de la orquesta de rock Magenta, compuesta por personas con discapacidad.

El bautizo se inició con una paraliturgia que estuvo a cargo del padre Fernando Fernández Bardales. Concluida la ceremonia religiosa, la directora del CAR Esperanza, Ida Castillo, brindó palabras de agradecimiento a los presentes y afirmó que es un gran honor ser parte de la vida de estos niños como padres y padrinos espirituales.

“Me siento renovada como madre y persona a través de este sacramento. Esto nos ha permitido seguir sensibilizándonos cada día más para brindar la mejor de las atenciones”, precisó.

En la ceremonia de bautizo también se hicieron presentes la trabajadora social Rocío Amable, en representación de la Unidad de Servicios de Protección de Personas con Discapacidad (USPPD), así como parte del equipo técnico del CAR, miembros del servicio de voluntariado, del Centro de Educación Básica Especial (CEBE) Palomitas y los padrinos de los menores.

Una vez finalizado el bautizo, todo este grupo, junto con el padre Fernando, se dirigió al Complejo INABIF donde se ubica el CAR Esperanza. Allí los niños bautizados, junto con el resto del equipo técnico, presenciaron la bendición de una gruta que fue otorgada por los esposos Hilda Yacila Zapata y Marcial Huerta de la empresa farmacéutica Vitofarma. Finalmente el padre Fernando bendijo también a los 16 residentes y a las instalaciones del local.