DIRECTORA EJECUTIVA DEL INABIF INVOCÓ A LAS FAMILIAS CON ESPÍRITU SOLIDARIO A SER PARTE DEL SERVICIO DE ACOGIMIENTO FAMILIAR

Nota de prensa

15 de enero de 2014 - 12:00 a. m.

La vida de un niño o niña que se encuentra bajo la tutela del Inabif no vuelve a ser la misma después de pasar un tiempo con una familia de acogida. Las vivencias, cuidados y experiencias de la convivencia en un ambiente de hogar, se vuelven invalorables en el desarrollo de estos menores.

Así lo señaló la Directora Ejecutiva del Inabif, Mg. Nancy Tolentino Gamarra, quien en entrevista en el programa Confidencias en RPP, conducido por Lupe Maestre, invocó a todas las familias peruanas a ser parte del servicio de Acogimiento Familiar, mediante el cual una familia puede acoger a un menor del Inabif de forma temporal.

Este programa, que se desarrolla en convenio con la organización Buckner de EEUU desde 2007, busca que los niños, niñas y adolescentes sin cuidados parentales puedan vivir temporalmente en un ambiente de familia real antes de que puedan volver con sus respectivas familias biológicas.


“La vida de un niño acogido nunca será igual, pues tendrá la experiencia de un hogar saludable, democrático, donde aprenderá a superar situaciones difíciles. Eso es imborrable y es un aspecto que en los centros de atención residencial del Inabif, pese a la buena atención que se les da, no se puede ofrecer a los menores”, explicó Tolentino.

Ella también dijo que el Código del Niño, Niña y Adolescente señala que la institucionalización de un menor que no tiene cuidados parentales debe ser la última alternativa de protección. Añadió que por eso se busca difundir el programa de Acogimiento Familiar como medida de protección excepcional de carácter transitorio.

Sobre los temores de algunos a que el retorno de los niños acogidos a sus familias biológicas pueda representar un momento difícil para los menores, el señor Fernando Labarthe, un padre de familia que acoge a una niña de 6 años, dijo que la separación no tiene por qué representar un problema, pues el vínculo con el menor no se perderá nunca.

“Creo que basta con que un menor sienta una hora de amor individualizado, hacia él o ella, para obtener una fuerza impresionante para la vida. La niña que vive con nosotros ahora conversa, y hasta dice que antes no sabía si podía hacer travesuras. La autoestima que le damos no tiene comparación”, indicó Labarthe.

Finalmente, la Directora Ejecutiva también destacó la aprobación de un proyecto de ley, por parte del Congreso, referido al Acogimiento Familiar, el cual buscará cambiar la mentalidad de las personas en beneficio de los niños y niñas desprotegidos, quienes podrán llevar un desarrollo más completo en un ambiente de hogar, de familia.