PROYECTO DE LEY DE ACOGIMIENTO FAMILIAR BUSCA REFORZAR EL TRABAJO QUE REALIZA EL INABIF
Nota de prensa



18 de abril de 2013 - 12:00 a. m.
El Director de la Unidad de Servicios de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (USPNNA), del Programa Integral Nacional para el Bienestar Familiar (INABIF), Lic. Gregorio Arratea, en diálogo con el periodista Juan Carlos Tafur, señaló que el Acogimiento familiar tiene como propósito principal que el niño, niña o adolescente que es recibido temporalmente por una familia acogedora termine regresando a su familia de origen.
Esta declaración la brindó el Director de USPNNA en entrevista en radio Capital que concedió para informar los beneficios y ventajas que ofrece el Proyecto de Ley de Acogimiento familiar que fue presentado recientemente por el INABIF y que es una iniciativa legislativa de la parlamentaria Aurelia Tan de Inafuko, Presidenta de la Comisión de la Mujer y Familia del Congreso de la República.
“Lo que busca este marco legal es impulsar el acogimiento familiar a nivel de todo el territorio nacional, y es muy necesario porque refuerza el trabajo que ya se viene haciendo desde el 2007. A la fecha hemos tenido 45 casos de acogimiento familiar y de ellos, dos casos emblemáticos uno de los cuales ha sido muy reciente”, señaló Arratea.
Según explicó en INABIF se tuvo un niño que estuvo recibiendo protección integral por tres años seguidos en un centro de atención residencial y luego pasó a una familia acogedora para que luego, después de otros tres años, regresara a su familia de origen.
“El Acogimiento familiar busca evitar que los niños residentes en los hogares del INABIF se institucionalicen. Por eso se plantea esta medida que es un tipo de alojamiento temporal, el mismo que puede durar 6 meses, un año o un año y medio”, contó el Director de USPNNA.
Arratea recalcó que este es un proceso transitorio, de reinserción, que procura que se le devuelva al niño el derecho de vivir en familia. “Ir a una familia acogedora le va a dar mayor oportunidad de recibir afecto y desarrollar muchas competencias y habilidades. Cuando un niño está en un CAR no se le puede ofrecer con total seguridad los vínculos afectivos que necesita”, dijo.
En otro momento, el licenciado Arratea descartó que esta medida afecte al niño, o a la familia acogedora. “El trabajo que se realiza es arduo y tiene atrás a un equipo técnico que realiza muchas evaluaciones psicológicas y sociales. Es importante aclarar que en algún momento la familia acogedora y la familia biológica establecen contacto para que este proceso sea normal y adecuado”, explicó.