Voluntarios mejoran Hogar de niñas del Inabif
Nota de prensaResanaron paredes, pintaron carpetas y dibujaron decenas de sonrisas.




2 de abril de 2012 - 12:00 a. m.
Un escuadrón rojo llenó de alegría y esperanza la vida de las más de 160 niñas y adolescentes, entre 12 y 17 años, que viven albergadas en el Centro de Atención Residencial (CAR) Ermelinda Carrera que se encuentra a cargo del Inabif.
Y es que cerca de 300 voluntarios del grupo cristiano “Camino de vida”, de Surco, llegaron hasta el histórico CAR para compartir una tarde de entretenimiento y sobretodo mejorar las instalaciones donde las menores de edad reciben atención integral (alimentación, albergue, vestido, salud y educación) por parte del Estado.
Los voluntarios se dividieron para desarrollar distintas tareas, las mismas que comprendieron el resanado y pintado de las paredes del local, que se encontraban descascaradas principalmente debido a la humedad de la zona donde está ubicado este Hogar así como al paso del tiempo.
Asimismo, rehabilitaron las carpetas donde las menores de edad reciben sus clases escolares, cortaron el cabello a las niñas con habilidades diferentes, ofrecieron manicure y hasta engrieron a las niñas con masajes de relajación.
Otra parte de los visitantes tuvieron como misión compartir con las menores de edad divertidas dinámicas y juegos en grupos, en donde el principal objetivo fue dibujar sonrisas y elevar el ánimo de las menores de edad.
Esta acción es sin duda, un buen ejemplo de lo que resulta cuando se une la sociedad civil y el Estado para desarrollar actividades de responsabilidad social que mejoran la calidad de servicio que se brinda a la población más vulnerable, acciones a las cuales el Inabif invita a la población en general a contribuir.
Y es que cerca de 300 voluntarios del grupo cristiano “Camino de vida”, de Surco, llegaron hasta el histórico CAR para compartir una tarde de entretenimiento y sobretodo mejorar las instalaciones donde las menores de edad reciben atención integral (alimentación, albergue, vestido, salud y educación) por parte del Estado.
Los voluntarios se dividieron para desarrollar distintas tareas, las mismas que comprendieron el resanado y pintado de las paredes del local, que se encontraban descascaradas principalmente debido a la humedad de la zona donde está ubicado este Hogar así como al paso del tiempo.
Asimismo, rehabilitaron las carpetas donde las menores de edad reciben sus clases escolares, cortaron el cabello a las niñas con habilidades diferentes, ofrecieron manicure y hasta engrieron a las niñas con masajes de relajación.
Otra parte de los visitantes tuvieron como misión compartir con las menores de edad divertidas dinámicas y juegos en grupos, en donde el principal objetivo fue dibujar sonrisas y elevar el ánimo de las menores de edad.
Esta acción es sin duda, un buen ejemplo de lo que resulta cuando se une la sociedad civil y el Estado para desarrollar actividades de responsabilidad social que mejoran la calidad de servicio que se brinda a la población más vulnerable, acciones a las cuales el Inabif invita a la población en general a contribuir.