Niño de programa Familias Acogedoras celebra cumpleaños con familia biológica

Nota de prensa
Junior cumple hoy 12 años. En esta oportunidad la celebración de su onomástico trae consigo un matiz diferente. Junior pasará este día con sus dos familias: la biológica y la que lo acoge pues

11 de mayo de 2011 - 12:00 a. m.

Junior cumple hoy 12 años. En esta oportunidad la celebración de su onomástico trae consigo un matiz diferente. Junior pasará este día con sus dos familias: la biológica y la que lo acoge pues él es uno de los niños beneficiados con el programa Familias Acogedoras que desarrolla el Inabif con el fin de ubicar en hogares temporales a los pequeños que por diversos motivos no pueden vivir con sus padres biológicos.

Hace un año y medio la familia Staub Gonzáles acogió a Junior, quien vivía en un albergue del Inabif, pero que hoy, gracias a este programa, convive en el seno de una familia constituida, a la espera de que sus padres superen los problemas que lo llevaron a esta institución.

Los papás biológicos de Junior trabajan vendiendo golosinas y viven, junto a sus otros cuatro hijos, en el distrito de El Agustino, en tanto Junior vive en Chorrillos con sus padres acogedores que son maestros. El pequeño practica natación y tenis y acude al colegio por las tardes.

Villy Díaz, la mamá de Junior, dice sentirse muy orgullosa al constatar los avances de su hijo, disfruta verlo reír y compartir momentos con sus hermanos menores. Sabe que dentro de un tiempo él volverá al hogar y por ello se esfuerza para que los miembros de su familia fortalezcan sus sentimientos y las responsabilidades que implica el estar unidos.

A lo largo de estos casi 18 meses en que Junior convive con su familia acogedora, el Inabif ha apoyado paralelamente a su familia biológica en diversos aspectos. Ha logrado, por ejemplo, que los hermanitos de Junior tengan su partida de nacimiento y sus respectivos DNI, además ellos cuentan ahora con un seguro de salud a través del SIS. Del mismo modo, los padres han recibido orientación y asesoría psicológica para que asuman su rol de mejor manera, a tal punto que están casi listos para recibir a Junior dentro de poco.

Junior sonríe al verse rodeado de sus padres y hermanos, hace hincapié en el gran amor que siente por ambas familias. En unos meses regresará a su casa de El Agustino, pero está seguro que el vínculo formado con sus padres acogedores, los Staub Gonzáles, no se romperá, asegura que no dejará de visitarlos: ‘ellos me dan la familia que necesito, estuvieron a mi lado cuando los necesité, siempre les estaré agradecido’, culmina antes de apagar las 12 velitas de su torta, cerrar los ojos fuertemente y pedir su deseo.