IIAP DESARROLLA INVESTIGACIÓN EN LA CONSERVACIÓN DEL ÁRBOL DE LA QUINA

Nota de prensa

Fotos: IIAP

Francisco Gallo Infantes

22 de abril de 2020 - 5:08 p. m.

El Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) actualmente desarrolla investigación y propuestas con el árbol de la Quina, conocido también como “árbol de la vida” porque salvó a la humanidad de la malaria gracias a sus propiedades medicinales. El árbol de la Quina también es un símbolo patrio porque se encuentra en el Escudo Nacional del Perú.

Los investigadores del IIAP trabajan en la utilización del árbol simbólico en sistemas agroforestales, así como actualizar el estatus poblacional y el estado de conservación, y determinar las mejores técnicas de producción de plantas mediante propagación clonal y por semilla botánica, además del contenido de quinina en diferentes especies y partes de la planta.

El equipo de investigación busca también establecer bancos de germoplasma y parcelas demostrativas para la conservación de los recursos genéticos. Las investigaciones se desarrollan en Tingo María y Pucallpa, pero se ampliará en otras áreas de las regiones de Huánuco, Ucayali, Pasco, Madre De Dios, Loreto, San Martin, Amazonas, Puno, Cajamarca, Lambayeque y Junín.

Recientemente investigadores de China y Francia manifestaron que la utilización del fármaco Hydroxicloroquina (molécula análoga a la quinina) tiene aparente eficacia, aceptable en el tratamiento de la neumonía causada por el COVID-19. Por lo tanto, al saber de las bondades de la quinina presente en la corteza y otras partes del árbol, es necesario considerar su uso como posibilidad para luchar contra el virus.

Es preciso anotar que los investigadores del IIAP son liderados por el director de investigación de Bosques, el doctor Dennis del Castillo, junto a Jorge Revilla, Carlos Abanto, Diego García, Wilson Guerra, Jhon Remuzgo, Edgar Cusi, Francisco sales y Kristell Rojas.

En tal sentido, se espera realizar un diagnóstico y un inventario completo, así como el estado de vulnerabilidad del árbol de la quina, con las mejores técnicas de propagación y producción de plantas en base a sustratos, aditivos, enraizantes y ambientes; así como 9 bancos de germoplasma establecidos, y 27 parcelas demostrativas instaladas en diferentes partes de la Amazonia.

Como meta final se ambiciona que estas especies sean distribuidas a comunidades y agricultores de la Amazonia con el lema “cada agricultor amazónico debe tener un árbol de quina en su propiedad”. De este modo, estas actividades contribuirán para la generación de tecnologías para la recuperación y conservación de las especies llamadas quina, y para dar posibles alternativas para el tratamiento del coronavirus.