¿Es el Misti un volcán activo?, por la Ing. Luisa Macedo

Nota Informativa
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18 de abril de 2018 - 11:43 a. m.

Por M. Sc. Luisa Macedo Franco, investigadora del Instituto Geofísico del Perú - Sede Arequipa El volcán Misti es uno de los 16 volcanes activos y potencialmente activos del Perú y se ubica a tan solo 17 km del centro de la ciudad de Arequipa, donde más de un millón de pobladores habitan ya a tan solo 10 km del cráter. La última erupción del Misti ocurrió entre 1440 a 1470, en los tiempos del inca Pachacútec. Actualmente, el Misti presenta actividad sísmica y fumarólica permanente, por lo cual el Instituto Geofísico del Perú (IGP) vigila las 24 horas del día su comportamiento. Ante el evidente estado de actividad, la vulnerabilidad de Arequipa se incrementa diariamente, dado que la ciudad crece hacia zonas cercanas al volcán consideradas como de muy alto riesgo. Esta problemática la observamos en los distritos de Alto Selva Alegre, Miraflores, Mariano Melgar, Paucarpata y Chiguata. Además de ello, en las quebradas que nacen en el volcán y que descienden hacia la ciudad, como la de San Lázaro, Pastores, Huarangal, Agua Salada y El Chical, se han edificado viviendas dentro de su cauce que serían muy perjudicadas en una eventual erupción, ya que flujos piroclásticos (nubes ardientes) o lahares (huaicos o flujos de lodo), que arrastran material volcánico, devastarían todo tras su paso. ¿Es necesario estudiar lo que sucede día a día en el volcán Misti? Sí, y por tales consideraciones, el IGP ha configurado una red de monitoreo en tiempo real para monitorear cada proceso que ocurre dentro del volcán. Diariamente, aunque ninguno de nosotros lo perciba, ocurren en el Misti entre 50 y 70 sismos con magnitudes inferiores a 2 grados. Estas señales sísmicas, imperceptibles para la población, indican a los vulcanólogos del IGP el estado en que se encuentra el volcán. Cuando el magma ascienda desde las profundidades, las estaciones de vigilancia lo registrarán con mucho tiempo de antelación, lo cual servirá para la emisión de alertas oportunas dirigidas a todos los arequipeños. ¿Hemos obtenido resultados? Creemos que sí, pero también admitimos que hay aún mucho por hacer. La información científica es la base para la gestión del riesgo de desastres y en los últimos años ha venido siendo tomada en consideración para acciones precisas, tales como la delimitación de límites de expansión territorial y del ejercicio de simulacros de erupción volcánica en las zonas de mayor riesgo. La primera acción de respuesta de todo arequipeño pasa por estar informado acerca del peligro que lo amenaza. Hoy sabemos que el Misti está activo y en cualquier momento puede iniciar una erupción. Involucrémonos en esta tarea y demostremos que juntos podemos generar un cambio. Publicado en la edición impresa del diario Correo Arequipa el 18 de abril del 2018