Anuncio presidencial sobre SAT y el rol del IGP

Nota Informativa
Archivo de Noticias Migrado

29 de julio de 2018 - 7:40 p. m.

El objetivo final de la sismología a nivel mundial es lograr predecir sismos, sin embargo, actualmente solo se ha logrado pronosticarlos. Cabe señalar que este pronóstico ha permitido mantener la esperanza de lograr en algún momento la tan anhelada predicción.

Hoy en día son varios los países que han intentado procedimientos para alertar a la población antes de la ocurrencia de sismos. Uno de estos viene funcionando en México, donde los grandes sismos ocurren debido al choque de las placas de Cocos y Norteamericana, todos con epicentro frente a sus costas, en el Océano Pacífico. Las bocinas de alarma en la Ciudad de México empiezan a sonar en el preciso instante en cuanto el sismo se produce y es registrado por los sensores costeros; en tanto que la onda sísmica, que viaja a 8 km/s, se demora en llegar cerca de 50 segundos para recorrer aproximadamente los 400 km de distancia que separan la costa de Ciudad de México. Valiosos segundos que la población mexicana, bajo entrenamiento y educación que tomó cerca de 20 años en afianzar, toma las medidas de seguiridad establecidas. Es de entenderse que las ciudades más cercanas al epicentro no tendrán segundos a favor bajo ningún procedimiento de alarma.

En nuestro país el sistema denominado SASPERU, es parte del Sistema de Alerta Temprana – SAT, citado en el reciente mensaje a la nación del Señor Presidente de la República, Ing. Martín Vizcarra, el mismo que requiere para su implementación de las siguientes cuatro etapas:

1. Adquisición e instalación de sensores en la zona costera.
2. Adquisición e instalación de bocinas en ciudades primarias.
3. Pruebas de transmisión y funcionamiento del sistema.
4. Educar a la población sobre el sistema (quizá la etapa más difícil).

El Instituto Geofísico del Perú – IGP ya cumplió con la primera etapa, se han instalado 45 sensores a lo largo de la zona costera del Perú, desde Tumbes hasta Tacna, dos de ellos en las islas Frontón y Hormigas. Esta última isla se encuentra ubicada a 60 km al oeste de la zona costera de Lima, en mar adentro, por lo que de ocurrir un sismo, el sensor daría a la población limeña alrededor de diez segundos de alerta antes que la onda sísmica sacuda el suelo en Lima y Callao.

Cumplido nuestro compromiso con el país, estamos evaluando la operatividad y el cierre de brechas de falta de instrumentos para hacer más efectivo el sistema.

De acuerdo al mensaje a la nación (pág. 31), en coordinación con INDECI, desde el IGP cumplimos el compromiso adquirido con nuestra población, a quienes servimos con responsabilidad.

Dr. Hernando Tavera, presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú – IGP

Foto de portada: Congreso de la República