Columna de opinión | Los huaicos y su impacto en la GRD

El Perú se encuentra expuesto a distintos peligros de origen natural, siendo los flujos de detritos (huaicos) uno de los de mayor recurrencia. Los huaicos son grandes masas rocas, lodo, ramas, etc; una mezcla viscosa que se traslada a grandes velocidades ladera abajo, destruyendo lo que esté a su paso, siendo el detonante las precipitaciones intensas, que se dan en las cuencas media y alta. Según estadísticas del CENEPRED, existen alrededor de 27 mil centros poblados expuestos a precipitaciones hasta el mes de marzo.

El día 5 de febrero de 2023, a consecuencia de las intensas precipitaciones se generan huaicos en la Quebrada Secocha, Camaná-Arequipa, estos flujos afectaron cinco anexos del distrito Mariano Nicolás Valcárcel de la provincia de Camaná, Arequipa. Según reportes del INDECI, la cifra de damnificados y afectados asciende a 17, 1984 y 4320 respectivamente y 17 víctimas mortales.

Secocha, es un centro poblado asentado sobre un abanico aluvial (zona de depósito de materiales de huaicos antiguos) y fue uno de los poblados más afectados. Esto se debe a la ocupación territorial sin restricciones en la zona, de tal forma que ya en el año 2004 tenía una población aproximada de 3 mil habitantes y hoy asciende a más de 20 mil y viven dentro del abanico aluvial próximo a la zona de quebrada. Es decir, el desconocimiento y la inacción por parte de las autoridades, hicieron que un evento de origen natural se convierta en un desastre.

Por otro lado, el Instituto Geofísico del Perú, genera periódicamente escenarios de ocurrencia de huaicos. Esto se logra usando modelos numéricos que permiten reproducir la dinámica de los flujos de detritos ante una magnitud de precipitación dada, es decir, se estiman alturas, velocidades, fuerza de impacto y trayectoria, para distintos escenarios. Asimismo, se ha implementado un sistema de detección de huaicos en las quebradas Huaycoloro y Río Seco, en la subcuenca Jicamarca. Este sistema está compuesto por estaciones de monitoreo las 24 horas del día, cada estación cuenta con sensores de presencia y altitud de flujo, cámaras con infrarrojo; ubicadas estratégicamente en la cuenca alta, lo cual permite alertar con anticipación la caída de huaicos; como sucedió en 2017 que, al alertar a SEDAPAL de manera oportuna, esta tomó las medidas correspondientes para que Lima no quede desabastecida de agua potable.

Finalmente, el IGP como parte de su compromiso con la GDR y con la población, proyecta en este 2023 realizar las coordinaciones que sean necesarias para implementar sistemas de monitoreo de huaicos en quebradas críticas, en coordinación con las autoridades locales y nacionales; de esa manera continuar haciendo: Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar.

Columna de opinión publicada en el diario Correo Arequipa.