Columna de Opinión: Estudios de suelos en la Costa Verde
Nota Informativa
Fotos: IGP
27 de febrero de 2022 - 9:39 a. m.
En los últimos 10 años los Acantilado de la Costa Verde (ACV), que une a seis distritos, han sido afectados por la ocurrencia de más de 17 deslizamientos de tierra con variados volúmenes y/o caída de rocas que han causado daños y efectos en la Vía Circuito de Playas y a sus usuarios. Por un peligro inminente ante nuevos derrumbes, en el año 2019, el Gobierno Central declaró el Estado de Emergencia de los ACV.
Es debido a esto, que el Instituto Geofísico del Perú (IGP), desarrolló en el 2021 el estudio Evaluación Geofísica y de Peligro Sísmico de los Acantilados de la Costa Verde (ACV), como parte del estudio multinstitucional coordinado por el CENEPRED y la Municipalidad Metropolitana de Lima, con la participación del IGN, INGEMMET, UNI-CISMID y DHN.
La evaluación geofísica permitió conocer las características físicas del suelo en los ACV y evaluar su comportamiento dinámico, a partir de la aplicación de diferentes métodos geofísicos (sísmica, eléctrica, gravimetría y electromagnéticos). Los resultados permitieron identificar, la presencia de suelos blandos con moderado contenido de humedad en capas cuyos espesores varían de 30 a 40 metros, espesor que se incrementa hacia el extremo norte de San Miguel, Conjunto Residencial de Marbella en Magdalena, extremo sur y norte de San Isidro y Miraflores respectivamente; así como el extremo sur de los distritos de Barranco y Chorrillos. Asimismo, en algunas zonas y a nivel superficial, se ha identificado la presencia de suelos con alto contenido de humedad hasta profundidades de 10 metros, contribuyendo a la presencia de asentamientos y grietas en el terreno. Se define en superficie, el límite que separa los suelos estables de los inestables, a una distancia de 220 a 60 metros, desde el borde del acantilado hacia el área urbana. Ante la ocurrencia de sismos en estas zonas con mayor riesgo se generarían elevados niveles de sacudimiento del suelo.
El IGP pone a disposición de la población su experiencia y conocimiento para el estudio de suelos, contribuyendo a la gestión del riesgo de desastres y seguir haciendo ciencia para protegernos, ciencia para avanzar.