Columna de Opinión: Las nubes y la importancia de su estudio

Nota Informativa
Por José Luis Flores, investigador científico

Fotos: IGP

Unidad Funcional de Comunicaciones

5 de marzo de 2021 - 9:05 a. m.

Las nubes son definidas como agregados visibles de partículas diminutas de agua, hielo o ambos que se encuentran suspendidos en el aire libre. En cualquier instante de tiempo, estas masas de agua cubren cerca de la mitad del planeta, tal como se observa desde imágenes satelitales. El patrón de nubes visto desde el espacio fluctúa fuertemente a medida que se forman, se disipan y se mueven con la circulación del aire. Son parte fundamental del comportamiento del tiempo atmosférico, el clima y el ciclo global del agua debido a los múltiples tipos de precipitación que generan, tales como lluvias ligeras o intensas, granizo, nieve o cristales de hielo. Las nubes han sido objeto de estudio científico desde la época de los antiguos griegos hasta la actualidad.

Para que se forme una nube, es necesario que una gran cantidad de aire húmedo se enfríe por debajo de su punto de rocío (sereno), que es la más alta temperaturaa la que empieza a condensarse el vapor de aguacontenido en el aire.En la atmósfera, el enfriamiento es causado, principalmente, por la expansión del aire ascendente, pero también puede ser causado por el enfriamiento radiactivo o por la mezcla de masas de aire con diferentes temperaturas y humedades.

Las nubes pueden clasificarse de acuerdo al nivel de altura que alcanzan y a la forma que tienen. Las nubes bajas, por tener su altura de base por debajo de los 2 km, se dividen en dos grupos: nubes tipo cúmulos, que pueden ser nubes cúmulos y cumulonimbos y las nubes estratiformes, que pueden ser neblinas, estratos, estratocúmulos y nimbostratos. Las medias pueden ser altoestratos o altocúmulos y la altura de la base de estas nubes se encuentran entre los 2 y 7 km. Finalmente, las altas pueden ser cirrus, cirrostratos y cirrocúmulos, cuya altura de base se encuentran entre 5 y 7 km.

En general, es importante el estudio de las nubes y de los procesos que originan su formación para entender y pronosticar la ocurrencia de diversos tipos de precipitación. En este contexto, el Instituto Geofísico del Perú viene desarrollando una serie de tecnologías de radar destinadas al monitoreo y a la implementación de sistemas de alerta temprana de lluvias intensas y deslizamientos en diversas regiones del Perú. Cuenta, además, con modelos atmosféricos regionales que estudian los procesos dinámicos que caracterizan la formación de diversos tipos de nubes que, a su vez, permitirán el pronóstico de lluvias en corto y mediano plazo.

A la fecha, estas tecnologías han sido implementadas en la región costa y sierra central del Perú; sin embargo, el IGP tiene la disposición de implementarlos en otras regiones interandinas del Perú y así contribuir en la gestión del riesgo de desastres y beneficiar a las poblaciones. Es cuestión de hacer «Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».