La Amazonía: reserva de agua para los Andes
Nota Informativa
Fotos: IGP
1 de setiembre de 2020 - 2:33 p. m.
Por: James Apaéstegui, investigador científico del IGP
¿Sabían que hoy, 1 de septiembre, se celebra el Día del Árbol? Este debe ser un día particularmente importante para el Perú, ya que el 60 % de nuestro territorio está cubierto de bosques y, además, ocupamos el noveno lugar entre los países con mayor extensión forestal del planeta. Conmemorar el Día del Árbol nos lleva directamente a pensar en la Amazonía y en su importancia para la humanidad.
La Amazonía es el pulmón de la Tierra. El 70 % de las plantas alimenticias y el 80 % de las especies medicinales del Perú proceden de sus bosques, los que no solo consiguen capturar los gases del efecto invernadero, sino que también sirven como hábitat para especies endémicas. Los bosques disminuyen los procesos de erosión y pérdida de los suelos, son parte de nuestra identidad cultural e importantes en la economía del país.
Uno de los roles más vitales de los bosques es la regulación del ciclo hidrológico, de particular interés en el territorio peruano. Recientes investigaciones han puesto en evidencia que aproximadamente el 50 % de la humedad que llega a la región Andina proviene de procesos asociados al reciclaje de humedad en el bosque amazónico. No obstante, este enfrenta severas amenazas: la deforestación, la minería ilegal y el avance de los cultivos industriales.
Sumado a ello, los bosques también enfrentan los impactos del cambio climático y han tenido que resistir inundaciones y sequías extremas recurrentes en los últimos años. Las evidencias científicas generadas por el Instituto Geofísico del Perú (IGP) indican que existen variaciones en la temporalidad de las lluvias, es decir, ocurren temporadas secas más largas y temporadas lluviosas más cortas, pero más intensas. La comunidad científica menciona que los árboles empiezan a alterar su dinámica natural para adaptarse, lo que sumado a los impactos antrópicos podrían generar daños irreversibles en el ecosistema y devenir en la probable pérdida de la Amazonía.
¿Somos conscientes de esta situación?, ¿la población de la región Andina conoce el rol de los bosques en el reciclaje de humedad y en la ocurrencia de lluvias en los Andes? La mejor estrategia para ayudar a los bosques es la educación, una que considere a la naturaleza como parte vital de un sistema para mejorar la calidad de vida de las personas y que fomente el desarrollo sostenible de los bosques.
En el IGP venimos investigando el rol actual y pasado de los bosques a fin de determinar el impacto de las lluvias en los Andes a través de indicadores geoquímicos y reconstrucciones paleoambientales; asimismo, generamos información importante ante la ocurrencia de incendios forestales, estudiamos el transporte de sedimentos en los ríos y evaluamos los impactos de las crecidas repentinas durante el periodo de recesión en la agricultura amazónica. IGP: «Ciencia para protegernos, Ciencia para avanzar».