Columna de Opinión | Cambio climático y océanos: es hora de actuar
Nota InformativaPor Ivonne Montes, investigadora científica del IGP

Fotos: IGP
10 de junio de 2025 - 10:29 a. m.
En el marco del Día Mundial de los Océanos, celebrado cada 8 de junio, es urgente visibilizar un aspecto muchas veces ignorado del cambio climático: su impacto en la dinámica y salud del océano.
Los océanos son aliados cruciales frente al calentamiento global, pero esta función tiene un costo. Las aguas se están calentando, acidificando y desoxigenando, lo que ya afecta a ecosistemas, especies marinas y modos de vida costeros.
El aumento sostenido de la temperatura del mar altera las corrientes oceánicas y la distribución del calor, intensificando fenómenos extremos como El Niño, ciclones y olas de calor marino, que agravan la pérdida de biodiversidad. Además, muchas especies migran hacia aguas más frías, desestabilizando los ecosistemas y afectando la pesca.
Los océanos son aliados cruciales frente al calentamiento global, pero esta función tiene un costo. Las aguas se están calentando, acidificando y desoxigenando, lo que ya afecta a ecosistemas, especies marinas y modos de vida costeros.
El aumento sostenido de la temperatura del mar altera las corrientes oceánicas y la distribución del calor, intensificando fenómenos extremos como El Niño, ciclones y olas de calor marino, que agravan la pérdida de biodiversidad. Además, muchas especies migran hacia aguas más frías, desestabilizando los ecosistemas y afectando la pesca.
La pérdida de oxígeno agrava la situación. Las llamadas “zonas de mínimo oxígeno” se expanden y se acercan a la costa, reduciendo hábitats y la muerte masiva de peces, como ya ha ocurrido en el Perú. Esta desoxigenación se relaciona directamente con el calentamiento global y el exceso de nutrientes que llegan desde tierra firme.
A ello se suma la acidificación oceánica, provocada por el CO2 disuelto, que perjudica a organismos calcificantes como corales, erizos y almejas, un proceso que afecta a toda la cadena alimentaria marina. El aumento del nivel del mar también genera intrusión salina en ríos y acuíferos costeros, lo que impacta en la disponibilidad de agua dulce y transforma humedales.
En el Perú estos cambios son especialmente relevantes. Nuestro mar forma parte de una de las regiones más productivas del mundo, pero también una de las más sensibles. Comprender lo que sucede en el océano es clave para tomar decisiones basadas en evidencia.
Desde la ciencia, ya se desarrollan herramientas para monitorear y anticipar estos cambios. El Instituto Geofísico del Perú (IGP) contribuye con proyectos, como SEPICAF, que emplea boyas ARGO para observar temperatura, salinidad y oxígeno, o modelos numéricos como el IGP Regional Earth System Model (RESM-COW), que permiten entender mejor estos procesos. Sin embargo, se requiere mayor inversión, continuidad y articulación con la gestión pública.
El Día Mundial de los Océanos no solo debe ser un momento de reflexión, sino de acción. Proteger el océano es proteger la vida. Es tiempo de fortalecer la investigación, restaurar ecosistemas marinos, reducir fuentes de contaminación y construir políticas públicas basadas en conocimiento oceanográfico. El océano nos ha protegido por siglos. Hoy, nos toca a nosotros protegerlo. IGP: «Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».
Columna de opinión publicada en diario Correo Arequipa
A ello se suma la acidificación oceánica, provocada por el CO2 disuelto, que perjudica a organismos calcificantes como corales, erizos y almejas, un proceso que afecta a toda la cadena alimentaria marina. El aumento del nivel del mar también genera intrusión salina en ríos y acuíferos costeros, lo que impacta en la disponibilidad de agua dulce y transforma humedales.
En el Perú estos cambios son especialmente relevantes. Nuestro mar forma parte de una de las regiones más productivas del mundo, pero también una de las más sensibles. Comprender lo que sucede en el océano es clave para tomar decisiones basadas en evidencia.
Desde la ciencia, ya se desarrollan herramientas para monitorear y anticipar estos cambios. El Instituto Geofísico del Perú (IGP) contribuye con proyectos, como SEPICAF, que emplea boyas ARGO para observar temperatura, salinidad y oxígeno, o modelos numéricos como el IGP Regional Earth System Model (RESM-COW), que permiten entender mejor estos procesos. Sin embargo, se requiere mayor inversión, continuidad y articulación con la gestión pública.
El Día Mundial de los Océanos no solo debe ser un momento de reflexión, sino de acción. Proteger el océano es proteger la vida. Es tiempo de fortalecer la investigación, restaurar ecosistemas marinos, reducir fuentes de contaminación y construir políticas públicas basadas en conocimiento oceanográfico. El océano nos ha protegido por siglos. Hoy, nos toca a nosotros protegerlo. IGP: «Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».
Columna de opinión publicada en diario Correo Arequipa