Columna de Opinión | Las avalanchas volcánicas: peligro letal
Nota InformativaPor Marco Rivera, investigador científico del IGP

Fotos: IGP
3 de junio de 2025 - 3:57 p. m.
Los volcanes no solo son imponentes monumentos naturales de belleza paisajística, sino también fuentes de múltiples amenazas para las poblaciones cercanas y los ecosistemas. Entre los peligros más temidos se encuentran los flujos de lava, los flujos piroclásticos y los lahares; sin embargo, existe uno menos conocido y, a menudo, subestimado: las avalanchas de escombros.
Este fenómeno se produce cuando un flanco del volcán colapsa parcial o totalmente, dando lugar a un alud masivo de rocas, tierra y materiales volcánicos que puede desplazarse a velocidades sorprendentes y recorrer decenas de kilómetros.
Hace 45 años, el 18 de mayo de 1980, el volcán Mount Saint Helens (EE. UU.) protagonizó uno de los episodios volcánicos más letales del siglo XX. A las 8:32 a. m., un sismo de magnitud 5.1, asociado a la liberación de magma y gases, provocó el colapso del flanco norte del volcán. Lo que siguió fue una gigantesca avalancha de escombros, estimada en 2.5 km³ de volumen. Esta masa, que equivaldría a un millón de piscinas olímpicas, desató una explosión lateral que arrasó más de 590 km² de bosque en cuestión de minutos, alcanzando velocidades de más de 1000 km/h. El saldo humano fue devastador: 57 personas fallecieron, muchas de ellas lejos de la zona inicialmente catalogada como peligrosa.
La tragedia de Saint Helens nos recuerda que las avalanchas no respetan fronteras ni distancias. En el Perú, varios de nuestros volcanes activos presentan condiciones propicias para desencadenar este tipo de fenómeno. El Misti, por ejemplo, ubicado a menos de 17 km de la ciudad de Arequipa, muestra un flanco vulnerable que, de colapsar, podría afectar directamente áreas urbanas e infraestructura crítica de la ciudad. Los volcanes Ubinas, Tutupaca, Sara Sara y Ticsani también presentan antecedentes o condiciones geológicas que ameritan vigilancia constante.
El Instituto Geofísico del Perú (IGP), como entidad adscrita al MINAM, realiza una labor científica clave en el monitoreo continuo de estos volcanes para identificar señales precursoras de una eventual reactivación. Sin embargo, reducir el impacto de una erupción volcánica o de una avalancha de escombros no depende únicamente de la ciencia. También es responsabilidad de la población y las autoridades locales evitar la urbanización en zonas de peligro para reducir el riesgo.
El caso de Saint Helens dejó una lección invaluable. La historia nos enseña y nos da la oportunidad de actuar responsablemente frente al entorno que habitamos. IGP: «Ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».
Columna de opinión publicada en el diario Correo Arequipa
Columna de opinión publicada en el diario Correo Arequipa