Columna de Opinión | El domo de lava en el Sabancaya

Nota Informativa
Por Riky Centeno, vulcanólogo del IGP
El domo de lava en el Sabancaya FOTO

Fotos: IGP

Unidad Funcional de Comunicaciones

1 de octubre de 2024 - 11:57 a. m.

El Sabancaya, el segundo volcán más activo del Perú, viene desarrollando desde finales de 2016 un proceso eruptivo, con la generación de diversos peligros volcánicos, entre ellos, la formación y evolución de domos de lava. Estos domos son estructuras que se forman cuando el magma viscoso emerge lentamente y se acumula alrededor del conducto volcánico, un fenómeno característico de magmas ricos en sílice, como es el caso de todos los volcanes ubicados en los Andes peruanos.

Recientemente, el Instituto Geofísico del Perú (IGP) reveló que, entre agosto de 2023 y agosto de 2024, se produjo la formación de un nuevo domo de lava en el volcán Sabancaya, el cual experimentó tres fases de crecimiento significativas. La primera, de diciembre de 2023 a marzo de 2024, elevó el nivel del domo en 11 metros. Tras una fase de destrucción parcial, en julio de 2024, se registró un crecimiento adicional de 34 metros. El área del domo aumentó de 56 100 m² a 69 100 m² en un año, lo que evidencia la continua alimentación de magma.

La presencia del domo no representa un peligro potencial para las comunidades cercanas. El escenario más probable es el desarrollo de una actividad eruptiva moderada, tal como se observa actualmente, con explosiones vulcanianas y emisiones de ceniza de hasta 3500 metros sobre la cima del volcán. Un escenario menos probable contempla un incremento significativo de la actividad, con mayor riesgo de colapsos parciales del domo y generación de flujos piroclásticos.

Afortunadamente, la red de monitoreo multiparamétrico del IGP permite una vigilancia constante del Sabancaya. De esta manera, puede detectar, mediante diferentes métodos, el crecimiento del domo, la actividad sísmica, la deformación del terreno y las anomalías térmicas. Estos datos son cruciales para la evaluación del peligro y determinación de escenarios futuros.

Es vital que la población se mantenga informada a través de los canales oficiales del IGP y siga las recomendaciones de las autoridades. Se debe respetar la zona de exclusión de 12 km alrededor del cráter y estar preparados con planes de evacuación. En caso de caída de ceniza, es crucial proteger las vías respiratorias y mantener cerradas puertas y ventanas.

La formación del domo de lava en el Sabancaya nos recuerda la importancia de la investigación científica y la comunicación efectiva entre expertos, autoridades y comunidades. Solo a través de una colaboración estrecha podremos convivir de manera segura frente a una erupción. IGP: «ciencia para protegernos, ciencia para avanzar».


Columna de opinión publicada en el diario Correo Arequipa