Cultivo de carachama: ¿cuáles son las características de los reproductores de esta especie?

La carachama común (Pterygoplichthys pardalis) es una especie altamente apreciada en la Amazonía peruana debido a su sabor y valor nutricional. Por ello, el Ministerio de la Producción (PRODUCE), a través del Fondo Nacional de Desarrollo Pesquero (FONDEPES), avanza su cultivo en condiciones controladas en el Centro de Acuicultura Nuevo Horizonte.

De acuerdo con el Protocolo de reproducción elaborado por el FONDEPES, uno de los principales aspectos del cultivo es contar con un plantel de reproductores adecuado, en número y calidad, según la producción planificada. Este grupo puede formarse mediante el acopio de ejemplares del ambiente natural o a través del reclutamiento de peces criados en ambientes controlados.

Características de los reproductores

Los reproductores deben presentar buenas condiciones morfológicas, es decir, un aspecto saludable y características físicas propias de la especie. La carachama común se distingue por su pigmentación con manchas oscuras irregulares en el vientre, similares a las de un leopardo, y por un patrón geométrico en la cabeza. Posee entre 29 y 30 escudos a lo largo de la línea lateral, y sus aletas dorsal, pectoral y pélvica cuentan con una espina y entre 5 y 11 radios, según el tipo.

Las hembras alcanzan la madurez sexual antes que los machos. En el medio natural, las hembras maduran entre 15 y 17 centímetros de longitud, mientras que los machos lo hacen entre 18 y 20 centímetros. En condiciones controladas, los peces pueden reproducirse desde el año y medio de edad.

Esta especie presenta una alta fecundidad, que varía entre 350 y 3100 huevos maduros, dependiendo del tamaño de la hembra reproductora, lo que la convierte en una alternativa importante para el desarrollo de la acuicultura amazónica.

Para mayor información puedes leer o descargar aquí: