Devida impulsa el desarrollo del Vraem con participación de madres emprendedoras
Nota de prensaLas acciones permiten empoderar a las mujeres de la zona y promover el emprendimiento y reactivar la económica local.
Fotos: Devida
8 de mayo de 2022 - 12:45 p. m.
La Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) promueve la participación de la mujer, en especial, de madres de familia, a través de iniciativas de desarrollo como actividades productivas que permiten consolidar la presencia del Estado en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).
En ese sentido, Devida promueve diversas actividades de ejecución directa y de transferencia de recursos en alianza con los gobiernos locales del Vraem para fomentar el desarrollo alternativo, integral y sostenible, el mismo que involucra la participación de hombres y mujeres de campo, muchas de ellas madres emprendedoras que sobresalen en sus distritos.
Es así que, desde el inicio del estado de emergencia a causa del covid - 19, el ente rector de lucha contra las drogas, a través de la actividad gestión comunal, logró mejorar las condiciones de habitabilidad y prolongar la vida útil de 13 comedores comunales en los distritos de Anchihuay, Samugari, Canayre, Sivia, Llochegua, Anco y Santa Rosa (Ayacucho).
En estos espacios de uso común participan madres que se esmeran en ofrecer una alimentación de calidad a los niños y adultos mayores y, de esta manera, contribuir a la reducción del hambre y aliviar los efectos de la pandemia.
Del mismo modo, Devida logró implementar a dos clubes de madres de Samugari y Llochegua con módulos de panificación, a fin de promover la diversificación productiva, generar ingresos económicos y garantizar la seguridad alimentaria para las familias de escasos recursos.
Rebeca Paredes Urriburú, socia del Club de Madres de Llochegua, destacó la intervención de Devida a favor de las familias y organizaciones sociales. “Desde que nos implementaron el módulo de panificación hemos aprendido a preparar variedad de panes. Ahora, con la asistencia de los profesionales estamos incrementando nuestra producción y de ese modo vamos a mejorar la calidad de vida de nuestras familias”, indicó.
De este modo, Devida contribuye en la participación de la mujer, en especial de las madres de familia, en los proyectos y actividades de desarrollo que garantizan la sostenibilidad del trabajo en la zona.
En ese sentido, Devida promueve diversas actividades de ejecución directa y de transferencia de recursos en alianza con los gobiernos locales del Vraem para fomentar el desarrollo alternativo, integral y sostenible, el mismo que involucra la participación de hombres y mujeres de campo, muchas de ellas madres emprendedoras que sobresalen en sus distritos.
Es así que, desde el inicio del estado de emergencia a causa del covid - 19, el ente rector de lucha contra las drogas, a través de la actividad gestión comunal, logró mejorar las condiciones de habitabilidad y prolongar la vida útil de 13 comedores comunales en los distritos de Anchihuay, Samugari, Canayre, Sivia, Llochegua, Anco y Santa Rosa (Ayacucho).
En estos espacios de uso común participan madres que se esmeran en ofrecer una alimentación de calidad a los niños y adultos mayores y, de esta manera, contribuir a la reducción del hambre y aliviar los efectos de la pandemia.
Del mismo modo, Devida logró implementar a dos clubes de madres de Samugari y Llochegua con módulos de panificación, a fin de promover la diversificación productiva, generar ingresos económicos y garantizar la seguridad alimentaria para las familias de escasos recursos.
Rebeca Paredes Urriburú, socia del Club de Madres de Llochegua, destacó la intervención de Devida a favor de las familias y organizaciones sociales. “Desde que nos implementaron el módulo de panificación hemos aprendido a preparar variedad de panes. Ahora, con la asistencia de los profesionales estamos incrementando nuestra producción y de ese modo vamos a mejorar la calidad de vida de nuestras familias”, indicó.
De este modo, Devida contribuye en la participación de la mujer, en especial de las madres de familia, en los proyectos y actividades de desarrollo que garantizan la sostenibilidad del trabajo en la zona.