Devida implementa programa de intervención familiar en comunidades rurales para prevenir conductas de riesgo

“Prevenir es construir futuro. Esta lucha no se limita a erradicar cultivos ilegales, se trata de fortalecer a las personas y las comunidades. Apostamos por una rentabilidad social que dé sentido, dignidad y sostenibilidad a cada intervención”, afirmó Carlos Figueroa Henostroza, presidente ejecutivo de Devida, durante la inauguración del Programa de Intervención Familiar en el ámbito rural.

Con el propósito de fortalecer los estilos de vida familiares y prevenir conductas de riesgo en adolescentes, Devida puso en marcha el Programa de Intervención Familiar en el ámbito rural. Esta estrategia está dirigida especialmente a familias asentadas en zonas rurales y comunidades nativas que han sido afectadas por el narcotráfico.

La intervención se desarrolla de manera articulada a través de los programas presupuestales de Desarrollo Alternativo Integral y Sostenible (PIRDAIS) y de Prevención y Tratamiento del Consumo de Drogas (PTCD), y se ejecuta en los ámbitos de acción de las nueve oficinas zonales de Devida.

Como parte del despliegue territorial, Devida viene capacitando a facilitadores mediante talleres descentralizados, con el objetivo de que acompañen a las familias en el fortalecimiento de vínculos afectivos, la mejora en la comunicación, el establecimiento de normas y la resolución de conflictos. Asimismo, se prioriza el desarrollo de habilidades psicosociales en adolescentes, para alejarlos de entornos de riesgo y violencia.

“Ninguna institución puede sola. Por eso articulamos salud, educación y desarrollo productivo en un enfoque integral, porque el enemigo que enfrentamos es complejo y camaleónico”, remarcó Figueroa.

El programa tiene como meta llegar a más de 3000 familias en su primer año de ejecución, priorizando territorios históricamente expuestos a las economías ilegales. La estrategia busca cortar el vínculo de las comunidades con el narcotráfico y abrir oportunidades de desarrollo sostenido.

“El narcotráfico no es solo un delito, es un modelo de negocio que enriquece a costa de la vida, la salud y la tranquilidad de las familias más vulnerables del país. Nuestra labor es enfrentarlo desde la raíz, no solo con interdicción, sino con cohesión, oportunidades y desarrollo”, enfatizó el titular de Devida.

A través de este esfuerzo intersectorial, Devida reafirma su labor como catalizador del cambio en las zonas más vulnerables del país. Cada familia que elige una vida libre de violencia y caminos sostenibles contribuye a la transformación estructural del territorio.