Acuicultura en el Vraem proyecta venta de 2.5 toneladas de pescado en Semana Santa

En el marco de las celebraciones por Semana Santa, Devida proyecta la comercialización de 2.5 toneladas de pescado en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), gracias a una serie de cuatro ferias acuícolas programadas durante el mes de abril en Ayacucho, Cusco y Junín. Esta iniciativa busca fortalecer la economía local a través de la piscicultura y promover el consumo de productos hidrobiológicos saludables y de origen sostenible.

Las ferias se desarrollarán en Huanta (16 de abril), Ayacucho (17 de abril), Pangoa (18 y 19 de abril), y Pichari-Kimbiri (18 y 19 de abril), y contarán con la participación activa de acuicultores organizados, quienes ofrecerán pescado fresco como paco y trucha, productos emblema de esta cadena productiva que se consolida como una alternativa al cultivo ilegal de coca en el Vraem.

Durante los eventos, los asistentes podrán disfrutar de la venta directa de pescado fresco, así como de una atractiva muestra gastronómica con platos típicos a base de paco y trucha. Además, se realizarán actividades de promoción como el concurso del paco más grande, la ruta del paco y sorteos de paiches, que buscan incentivar el conocimiento y valoración de esta actividad acuícola por parte de la comunidad.

Estas acciones forman parte de una estrategia integral de Devida que, en el marco de la Política Nacional contra las Drogas al 2030, promueve el desarrollo económico y social de las comunidades del Vraem. Actualmente, 866 familias en 21 distritos de Ayacucho, Cusco y Junín participan en esta cadena productiva con apoyo técnico especializado en crianza de peces, alimentación, cosecha y comercialización.

“La acuicultura en el Vraem no solo representa una fuente de ingresos sostenibles, sino una alternativa real para desvincular a más familias de las economías ilegales y del narcotráfico. Gracias a estas ferias, los acuicultores tienen acceso directo a nuevos mercados y los consumidores pueden acceder a productos de calidad y origen seguro”, señaló un representante de Devida.

Además del impacto económico, esta actividad contribuye a fomentar una alimentación saludable en zonas vulnerables al narcotráfico, donde el consumo de pescado se ha incrementado gracias a campañas de promoción y educación alimentaria impulsadas por Devida.