Defensoría del Pueblo demanda a gobiernos regionales garantizar la educación presencial de acuerdo a su contexto territorial

Defensoría del Pueblo

Frente a las movilizaciones sociales y el paro general de transportistas, diversas direcciones regionales de educación (DRE) han suspendido las clases presenciales. Ante ello, la Defensoría del Pueblo se dirige a los gobiernos regionales y demanda lo siguiente:

Garantizar la continuidad del servicio educativo presencial cuando existan las condiciones adecuadas para salvaguardar la vida, la salud y la integridad de las/os estudiantes, del personal docente y de toda la comunidad educativa. Además, a fin de asegurar el acceso a las clases presenciales, deberán adoptar acciones para asegurar la disponibilidad de trasporte urbano y rural seguro, para el traslado de estudiantes y personal de las escuelas, con pleno cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos por los sectores correspondientes.

Priorizar las clases presenciales, por ser de importancia para el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes, más aún después del cierre prolongado de las escuelas debido a la pandemia por el COVID-19.

Monitorear que las direcciones regionales de educación (DRE) y las unidades de gestión educativa local (UGEL) realicen una evaluación continua y objetiva de la realidad territorial, con la finalidad de que la adopción de medidas, como la suspensión de clases, sean excepcionales y debidamente justificadas. Asimismo, asegurar que cuando se decida suspender las clases presenciales se cumpla con brindar el servicio a distancia o, cuando ello no sea posible, con recuperar las horas lectivas.

Comunicado n.° 19/DP/2022

Garantizar que las escuelas, a través de los Comité de Gestión del Bienestar, evalúen e implementen las acciones necesarias que permitan el acompañamiento socioafectivo de las/os estudiantes para su bienestar y acceso a un clima escolar positivo, especialmente, en este escenario.

Finalmente, la Defensoría del Pueblo exhorta a madres, padres y/o cuidadoras/es a informar a niñas, niños y adolescentes, con un lenguaje claro y sencillo, sobre los actuales acontecimientos; absolver sus dudas y estar atentas/os a sus emociones para brindarles tranquilidad y apoyo desde el entorno familiar.