Ratifican sentencia de cuatro años para hombre que estafó a una pareja

Nota de prensa
De acuerdo con la fiscalía, el condenado vendió a los agraviados un terreno que se encontraba hipotecado a un banco.
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Fotos: Imagen Institucional

18 de julio de 2024 - 4:59 p. m.

En sentencia de segunda instancia, la Segunda Sala Penal de Apelaciones confirmó la sentencia de cuatro años de pena privativa de la libertad suspendida, por el periodo de prueba de dos años, a Carlo Brandon Castellano Linares, como autor del delito contra el patrimonio, en la modalidad de estafa agravada, en agravio de Humberto Rabanal Tejada, Jessica Elizabeth Ventura Valdez y la Procuraduría Pública de la Sunarp.

Los hechos imputados


El 18 de noviembre de 2011, Humberto Rabanal Tejada y su esposa, Jessica Elizabeth Ventura Valdez, adquirieron el inmueble de la Mz 2023, lote 9B1, Callería, de propiedad de Carlo Brandon Castellanos Linares.

Previamente a la compra, el 10 de noviembre, el agraviado recabó de las oficinas de los Registros Públicos de Ucayali copia literal simple donde señalaba que no existía hipoteca alguna sobre el predio del sentenciado, como tampoco título pendiente.

Con esa información, la pareja agraviada procedió a comprar la propiedad de Castellanos Linares.

Después de 10 meses de haber adquirido el terreno libre sin construcción, de una extensión de 5.15 de frente por 30.35 metros de largo, tomó conocimiento de que esta se encontraba siendo rematada por el Banco Continental, la cual se venía tramitando en el Juzgado civil de Coronel Portillo, con el expediente 1984-2013-0-2402-JR-CI-01.

Sorprendido por la información, el agraviado presentó copia del documento recabado por los Registros Público de Ucayali, así como el certificado de gravámenes de la Sunarp, donde hace constar que sobre su terreno no constaba ninguna carga y anotaciones en el registro, y que dicha información fue recabada de la misma demanda presentada por el Banco Continental.

De acuerdo con la fiscalía, durante la investigación, se recabó la declaración de Carlo Brandon Castellanos Linares, quien afirmó que el terreno que vendió a los agraviados se encontraba libre de toda hipoteca.

Agregó, además, que, si bien tenía dos deudas con el banco, una de ella por una tarjeta de línea empresarial revolvente, y el otro por una garantía mobiliaria de una camioneta Hilux-Toyota, el trabajador del Banco Continental Rafael Rengifo Vásquez le aseguró que la propiedad que vendió no se encontraba hipotecada y tampoco con deudas.

El funcionario del banco cuando le tocó declarar afirmó que, si bien era cierto lo que Castellanos Linares declaró, sin embargo, omitió decir que contrajo otras deudas que no pudo pagar, por lo que puso como garantía hipotecaria el terreno que vendió. Por esa razón, se le remitió a la oficina de riesgos al no proponer algún tipo de reestructuración.