Tocamientos indebidos: 9 meses de prisión preventiva para presunto agresor de una menor

El Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria de Coronel Portillo dictó nueve meses de prisión preventiva a David Dávila Castillo, por ser el presunto autor del delito de tocamientos, actos de connotación sexual o actos libidinosos, en agravio de una menor de 12 años.

En consecuencia, el investigado permanecerá en el Establecimiento Penitenciario de Pucallpa, desde 8 de julio de 2024 hasta el 7 de abril de 2025, día en que recobrará su libertad, salvo que haya contra el imputado algún otro mandato de detención, dictado por algún juzgado del país.

Según el Ministerio Público, del distrito fiscal de Ucayali, el pasado 8 de julio, siendo las 8 de la noche, la agraviada y su prima se dirigieron a la casa de una amiga, ubicado en el jirón 29 de Mayo, Callería. para asistir a un quinceañero.

Luego de permanecer por una hora y media, tanto la menor como su prima y algunos amigos suyos, se retiraron de la fiesta con dirección al sector de la Hoyada, donde los iba a recoger el tío de la víctima.

En esas circunstancias apareció una camioneta, marca Honda, color negro, dirigida por el imputado David Dávila Castillo, y como copiloto una menor de 15 años. Este se detuvo frente a los adolescentes para preguntarles por una dirección que nadie supo dar razón.

En ese momento, la menor que estaba en la camioneta se bajó para conversar con sus amigos. El investigado aprovechó que se quedó solo para llamar a la agraviada. Una vez dentro de la camioneta este le preguntó cuánto cobraba por tener sexo, mientras la manoseaba sus senos y partes íntimas. Asustada comenzó a gritar, pidiendo ayuda y queriendo salir del vehículo. Como no podía, sus amigos quisieron abrir la puerta, pero no tuvieron éxito.

Recién lograron rescatarla cuando rompieron los vidrios de la camioneta. En ese instante apareció el tío de la menor, quien inmediatamente condujo a su sobrina hacia donde estaba su mamá, quien al enterarse de los hechos llamó al 105, solicitando apoyo.

El personal policial que se encontraba patrullando por la jurisdicción de Callería, al recepcionar la llamada de la central de operaciones, se dirigió al sector de la Hoyada, observando que unas 30 personas tenían rodeado una camioneta. Al preguntarles la razón de tal medida, todos acusaron a David Dávila Castillo de tocamientos indebidos contra un menor, pero este negó los hechos. Por el contrario, afirmó que la turba le había roto los vidrios de su carro porque se negó a pagarles.

En ese momento, llegó la madre de la agraviada indicando que su menor hija minutos antes había sido víctima de tocamientos indebidos por parte del investigado, por lo que inmediatamente este fue trasladado a la comisaría para las diligencias del caso.