Por tocamientos indebidos a una menor sentencian a 9 años de cárcel al agresor
Nota de prensaDe acuerdo con el Ministerio Público, la mamá de la agraviada encontró al hombre encima de su hija, en el caserío La Libertad, Aguaytía.


Fotos: Imagen Institucional
16 de junio de 2024 - 6:30 p. m.
La Primera Sala Penal Liquidadora ratificó la condena de nueve años de prisión efectiva a Miguel Ángel Espinoza Bautista, por ser el autor del delito de tocamientos, actos de connotación sexual o actos libidinosos en menores, en agravió de una niña de 9 años.
Los miembros de la Primera Sala asimismo le fijaron una reparación civil de S/ 3000, que será pagado por el sentenciado en favor de la parte agraviada, en ejecución de sentencia.
De esta manera desestimó el recurso de apelación presentado por la defensa de sentenciado que buscaba se revoque el fallo por varias razones. Por ejemplo, a su juicio, el colegiado consideró que los actos supuestamente realizados por el sentenciado, se habrían suscitado cuando la menor agraviada contaba con seis años, empero, durante el juicio y de la actividad probatoria ello no se pudo comprobar. “Sobre este extremo, el colegiado únicamente ha deducido que fue cierto la versión de la madre y la menor sin corroborar con otros medios de prueba”, se lee en su escrito.
Igualmente, la defensa cuestionó el trabajo de la psicóloga, porque consideró que la profesional de manera habilidosa buscó que la agraviada responda para perjudicar a su cliente.
Las circunstancias
En el caserío Libertad, Aguaytía, la agraviada vivía con su mamá y hermanitos menores.
Según la fiscalía, el 22 de junio de 2022, siendo las seis de la tarde, cuando la mamá de la menor se encontraba lavando ropa en el patio de su casa, el sentenciado, que estaba enseñando la tarea escolar, cogió la mano de la agraviada fuertemente para luego tocarle sus partes íntimas.
No conforme con esa acción, la llevó a la fuerza a la cama donde quiso violarla, pero la agraviada se defendió y comenzó a gritar, por lo que el sentenciado le tapó la boca con la mano. En ese momento, la mamá ingresó a la habitación y vio a Espinoza Bautista encima de su hija, preguntando qué estaba pasando a lo que la menor le contó lo sucedido, sin embargo, el agresor dijo solo la estaba levantando hacia un costado. La agraviada llorosa replicó que el hombre estaba mintiendo y que no era la primera vez que la tocaba. Estando en Lima, dos veces hizo lo mismo cuando ella tenía solo seis años.
De acuerdo con el Ministerio Público, el agresor asustado pidió disculpas, afirmando que se le había pasado la mano. La mamá cogió a sus hijos y salió de la casa con dirección a Aguaytía. Cuando llegó a la ciudad, le contó lo sucedido a sus amigas, quienes la aconsejaron denunciar los hechos a la policía.