Ordenan 36 meses de prisión preventiva para presuntos integrantes de “Los Capibaras” por organización criminal y secuestro extorsivo

Nota de prensa
Según la tesis fiscal, los investigados serían presuntos integrantes de la organización criminal “Los Capibaras” que operaban en los departamentos de Ucayali, Huánuco y Pasco.
Ordenan 36 meses de prisión preventiva para presuntos integrantes de “Los Capibaras” por organización criminal y secuestro extorsivo

Oficina de Imagen Institucional

17 de julio de 2025 - 12:44 p. m.


El Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de Coronel Portillo, a cargo del Dr. José Huamani Taype, dictó 36 meses de prisión preventiva contra los investigados Imer Kike Ticliahuanca Reyes (“Kike”), Mamerto León de la Cruz (“Mamerto”) y Marcelo Zamora Lachi (“Tigre”) por los presuntos delitos de organización criminal y extorsión en el subtipo secuestro extorsivo en agravio del Estado Peruano y los ciudadanos Francisco Andrés Alanoca Ramírez y la menor de iniciales L.F.P.G. En consecuencia, el juez ordenó su prisión preventiva, contados desde su detención efectiva, el 3 de julio de 2025, hasta el 2 de julio de 2028. Asimismo, se dispuso su internamiento en el establecimiento penitenciario de Pucallpa.


La Judicatura concluyó que los graves y fundados elementos de convicción se componen de reconocimientos físicos, testimonios de testigos protegidos, contradicciones flagrantes y autoincriminaciones parciales de los propios imputados, así como de conductas obstruccionistas debidamente acreditadas. La suma de estos elementos, valorados de forma lógica e integral permite establecer con un alto grado de probabilidad la vinculación de los tres investigados con los delitos imputados, satisfaciéndose así el primer y más riguroso de los presupuestos para declarar fundado el requerimiento fiscal de prisión preventiva.


Además, el magistrado sostuvo que existe un elevado y concreto peligro de fuga y de obstaculización que ninguna medida menos gravosa puede neutralizar. El principal factor que impulsa el riesgo de fuga es la extrema gravedad de la pena que enfrentan, que incluye la cadena perpetua.


¿Qué pasó?



Según el Ministerio Público, el 3 de noviembre de 2024, Francisco Andrés Alano Caramirez fue secuestrado en el Caserío San Alejandro, distrito de Puerto Zungaro, por sujetos que irrumpieron en su parcela y lo trasladaron en una embarcación fluvial con rumbo desconocido. Los captores exigieron un millón de soles por su liberación. El hecho fue denunciado ante el Departamento de Investigación Criminal de Constitución y comunicado a la Fiscalía de Puerto Inca.


Las investigaciones realizada por la Fiscalía reforzadas por la División de Secuestros y Extorsiones de la DIRINCRI, permitieron identificar a Nilthons Josias Lino Abad, alias “Nilton”, como uno de los autores del delito, junto a otros sujetos apodados “Macho” y “Mote”. El Ministerio Público sostiene que estos individuos forman parte de una organización criminal que opera en la zona amazónica, vinculada a delitos como sicariato, tráfico de drogas y armas, y que mantiene control territorial en regiones de Huánuco y Ucayali.


El fiscal aseguró además que el testimonio de la esposa de la víctima fue fundamental para el caso. Relató que recibió llamadas extorsivas desde el celular de su esposo, con amenazas contra su familia y exigencias económicas que iniciaron en un millón de soles y luego se redujeron a medio millón. Además, recibió videos donde su esposo aparecía maniatado y vigilado, lo que evidenció el riesgo de vida. Rosa identificó como posibles involucrados a extrabajadores cercanos a su esposo, incluido “Nilton”, y autorizó el uso de la información de su celular para apoyar la investigación.


En esta etapa de la investigación, según el requerimiento fiscal, se ha determinado que la organización criminal “Los Capibaras” estaría detrás del secuestro del ciudadano Alanoca Ramírez y de la adolescente de iniciales L.F.P.G., así como de otros delitos graves. Esta organización opera con impunidad en diversas zonas de Pasco, Huánuco y Ucayali, donde mantiene el control territorial gracias a su presunta colusión con funcionarios públicos y autoridades corruptas. Su accionar criminal se centra en el secuestro con fines extorsivos, teniendo como principales víctimas a empresarios, ganaderos y comerciantes.


“Los Capibaras” estarían liderados por Raidy Brander Vargas Mateo, alias “Macho” o “Vacho”, y conformados por diversos sujetos identificados con alias como “Mote”, “Búho”, “Rodrigo”, “Nilton”, “Tigre”, “Chino”, “Kike”, entre otros. A pesar de que algunos miembros, incluido su cabecilla, se encuentran actualmente recluidos en el penal de Pucallpa, según la tesis fiscal, la organización continúa operando, desatando violencia, asesinatos y temor en la población. Estos hechos configuran los elementos necesarios para considerarlos una organización criminal activa y peligrosa.


El fiscal precisó que los integrantes de la organización criminal “Los Capibaras” operan con una estructura funcional bien definida, asignando roles específicos a cada miembro según sus habilidades y en función de los objetivos del grupo. Raddy Brander Vargas Mateo, alias “Macho” o “Vacho”, es identificado como el cabecilla y quien proporciona el lugar de cautiverio. Vicente Aquino Lino (“Mote” o “Capibara”) ejecuta secuestros y homicidios junto a otros, mientras que Delmer Lino Abad (“Búho”) sería el encargado de eliminar a las víctimas para evitar su identificación.


Rodrigo Franco Romero (“Mani”) facilita vehículos y realiza cobros; Mamerto León de la Cruz (“Mamerto”) selecciona y custodia a las víctimas; Marcelo Zamora Lachi (“Tigre”) se encarga del cautiverio y del armamento; Imer Kike Ticliahuanca (“Kike”) y Ayder Durán (“Chino”) apoyan con la logística y negociación de rescates; y Aaron Espinoza Palomino (“Aron”) también cumple funciones de vigilancia de los secuestrados. Esta división de tareas confirma el carácter estructurado y planificado de la organización criminal.