Condenan a padre de familia por agresión física contra su hija menor y su conviviente en Yarinacocha
Nota de prensaTras los hechos de violencia familiar, la jueza impuso al sentenciado trabajo comunitario, inhabilitación y reparación civil en favor de las víctimas.

2 de julio de 2025 - 6:18 p. m.
La jueza del Segundo Juzgado Penal Unipersonal Transitorio de Coronel Portillo, Dra. Giannina Macedo Segura, aprobó el acuerdo de la conclusión anticipada acordada entre el acusado, la defensa técnica y el Ministerio Público, condenando a Jaime Luis Ramírez Tapullima como autor del delito de agresiones contra mujeres o integrantes del grupo familiar en la modalidad de violencia física, en agravio de la menor S. L. R. S., de 16 años, y de Lelita Serrano Gómez, imponiéndole una pena privativa de libertad de dos años, ocho meses y diez días, la cual fue convertida en 141 jornadas de prestación de servicios a la comunidad.
Además, se dispuso su inhabilitación por el mismo plazo, prohibiéndole acercarse o comunicarse con las víctimas con fines de agresión física o psicológica. Respecto a la reparación civil, se fijó el monto de S/300.
Hechos
Conforme a la acusación fiscal, el acusado Jaime Luis Ramírez Tapullima es padre de la menor agraviada de iniciales S. L. R. S. (16) y conviviente de Lelita Serrano Gómez, con quien tiene tres hijos y reside en la Comunidad Nativa Nuevo San Juan II, en Yarinacocha. El fiscal describió que el 30 de mayo de 2025, alrededor de las 10:00 a. m., el acusado habría ordenado a su hija llevar un balón de gas al lugar donde él trabajaba junto a Lelita Serrano. Sin embargo, la menor no lo hizo de inmediato, pues planeaba llevarlo al mediodía antes de asistir al colegio donde estudia.
El Ministerio Público señaló que, aproximadamente a las 12:30 p.m., el acusado y su pareja regresaron al domicilio y encontraron a la menor lista para ir a clases. En ese momento, el imputado empezó a insultarla con frases denigrantes y luego la llevó a su cuarto, donde le propinó cachetadas, puñetes y correazos. Ante los gritos, la madre intentó defender a la menor, pero fue agredida también, recibiendo una cachetada que la hizo caer al suelo. El fiscal precisó que, tras lo ocurrido, la menor acudió a su colegio, donde los docentes al notar las lesiones impulsaron la denuncia ante la comisaría.
Durante las diligencias, el Ministerio Público ordenó los exámenes médico-legales, los cuales confirmaron lesiones recientes en ambas agraviadas. La menor presentaba lesiones por golpes con objeto contundente y fricción con uña humana, requiriendo atención médica por un día y una incapacidad médico-legal de seis días. En tanto, Serrano Gómez tenía una excoriación por fricción en el dedo de la mano izquierda, con un día de atención facultativa y dos días de incapacidad médico-legal. Estos elementos fueron expuestos por la Fiscalía como sustento de la acusación por violencia física dentro del grupo familiar.