Nueve meses de prisión preventiva a "Clan Familiar Los Ahuites"
Nota de prensaSegún la tesis fiscal, se encontraron 164 billetes de S/100 junto con otros de diversas denominaciones, tanto nacionales como extranjeros.

10 de febrero de 2025 - 7:14 p. m.
La jueza del Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria, Dra. Sally Beltrán Torres, ordenó nueve meses de prisión preventiva contra Acela Hidalgo Ahuite, Benny Hidalgo Ahuite y José Leonardo Linares Vásquez. Estos investigados son presuntos integrantes del grupo denominado por la Policía Nacional del Perú como “Clan Familiar Los Ahuites”. Actualmente están siendo investigados por su presunta participación en el delito contra el orden financiero y monetario, específicamente en la modalidad de tráfico de moneda falsa en agravio de la Oficina Central de Lucha contra la Falsificación de Numerario, Oficina adscrita al Banco Central de Reserva del Perú.
En consecuencia, la magistrada ordenó el ingreso de los imputados Acela Hidalgo Ahuite, Benny Hidalgo Ahuite y José Leonardo Linares Vásquez al centro penitenciario de Pucallpa. Dicho período comenzará desde la fecha de su detención, es decir, el 6 de febrero del 2025, hasta el 5 de noviembre del 2025.
¿Qué pasó?
La tesis del Ministerio Público indica que, el 6 de febrero de 2025, agentes policiales de la Comisaría Pucallpa realizaron una intervención en el jirón 09 de Diciembre con la calle Cecilio Fernández. Los agentes del orden observaron a una mujer saliendo sospechosamente de un inmueble y abordando un vehículo trimóvil azul. El personal policial siguió al vehículo hasta la intersección de las avenidas San Martín y Comandante Barrera y procedió a intervenir.
El conductor Waldemar Hidalgo Ahuite explicó a la policía que estaba con su conviviente Claudia Pacaya Fasabi y sus dos hijos menores. Al preguntar sobre la salida del inmueble, Waldemar admitió que había mandado a Claudia a comprar dinero falso para celebrar su cumpleaños. Durante el registro personal del adolescente de 16 años, según la Fiscalía, se encontró un billete aparentemente falso. La policía se dirigió al inmueble mencionado para verificar la información e incautó el vehículo trimóvil para fines de investigación.
En el tercer piso de dicho inmueble, conforme el requerimiento fiscal, Acela Hidalgo Ahuite fue encontrada con billetes falsos nacionales y extranjeros sobre su cama y dentro de un cofre. Benni Hidalgo Ahuite también fue encontrado con billetes falsos en un cajón del comedor del segundo piso, además de haber impedido inicialmente el acceso policial al inmueble. José Leonardo Linarez Vásquez, ciudadano venezolano presente en el segundo piso, tampoco ofreció explicación sobre los billetes hallados.
Fundamentos judiciales
La Judicatura ha concluido que existen fundados y graves elementos de convicción que vinculan a Acela Hidalgo Ahuite, José Leonardo Linarez Vásquez y Benny Hidalgo Ahuite como presuntos autores del delito contra el orden financiero y monetario, específicamente en la modalidad de tráfico de moneda falsa. Este delito está previsto y sancionado en el artículo 254 del Código Penal, en agravio de la Oficina Central de Lucha contra la Falsificación de Numerario, Oficina adscrita al Banco Central de Reserva del Perú.
La magistrada considera que la prisión preventiva solicitada por el Ministerio Público es una medida idónea, necesaria y proporcional para asegurar la eficacia del proceso penal. Destaca que la falta de arraigo, la gravedad de los delitos imputados, la alta prognosis de la pena y el riesgo de obstaculización justifican plenamente la adopción de esta medida cautelar.
En consecuencia, la magistrada ordenó el ingreso de los imputados Acela Hidalgo Ahuite, Benny Hidalgo Ahuite y José Leonardo Linares Vásquez al centro penitenciario de Pucallpa. Dicho período comenzará desde la fecha de su detención, es decir, el 6 de febrero del 2025, hasta el 5 de noviembre del 2025.
¿Qué pasó?
La tesis del Ministerio Público indica que, el 6 de febrero de 2025, agentes policiales de la Comisaría Pucallpa realizaron una intervención en el jirón 09 de Diciembre con la calle Cecilio Fernández. Los agentes del orden observaron a una mujer saliendo sospechosamente de un inmueble y abordando un vehículo trimóvil azul. El personal policial siguió al vehículo hasta la intersección de las avenidas San Martín y Comandante Barrera y procedió a intervenir.
El conductor Waldemar Hidalgo Ahuite explicó a la policía que estaba con su conviviente Claudia Pacaya Fasabi y sus dos hijos menores. Al preguntar sobre la salida del inmueble, Waldemar admitió que había mandado a Claudia a comprar dinero falso para celebrar su cumpleaños. Durante el registro personal del adolescente de 16 años, según la Fiscalía, se encontró un billete aparentemente falso. La policía se dirigió al inmueble mencionado para verificar la información e incautó el vehículo trimóvil para fines de investigación.
En el tercer piso de dicho inmueble, conforme el requerimiento fiscal, Acela Hidalgo Ahuite fue encontrada con billetes falsos nacionales y extranjeros sobre su cama y dentro de un cofre. Benni Hidalgo Ahuite también fue encontrado con billetes falsos en un cajón del comedor del segundo piso, además de haber impedido inicialmente el acceso policial al inmueble. José Leonardo Linarez Vásquez, ciudadano venezolano presente en el segundo piso, tampoco ofreció explicación sobre los billetes hallados.
Fundamentos judiciales
La Judicatura ha concluido que existen fundados y graves elementos de convicción que vinculan a Acela Hidalgo Ahuite, José Leonardo Linarez Vásquez y Benny Hidalgo Ahuite como presuntos autores del delito contra el orden financiero y monetario, específicamente en la modalidad de tráfico de moneda falsa. Este delito está previsto y sancionado en el artículo 254 del Código Penal, en agravio de la Oficina Central de Lucha contra la Falsificación de Numerario, Oficina adscrita al Banco Central de Reserva del Perú.
La magistrada considera que la prisión preventiva solicitada por el Ministerio Público es una medida idónea, necesaria y proporcional para asegurar la eficacia del proceso penal. Destaca que la falta de arraigo, la gravedad de los delitos imputados, la alta prognosis de la pena y el riesgo de obstaculización justifican plenamente la adopción de esta medida cautelar.