Perú, una Maravilla por descubrir
Documento de Gestión
21 de octubre de 2022
Historia
Las evidencias del establecimiento de colonias humanas en Perú se remontan a miles de años, pero, exceptuando algunas ruinas dispersas, poco se sabe de esos antiguos pobladores. Hacia el 1250 a.C. diversos grupos que procedían del norte se establecieron en regiones como Chavín, Chimú, Nazca y Tiahuanaco.
Las evidencias del establecimiento de colonias humanas en Perú se remontan a miles de años, pero, exceptuando algunas ruinas dispersas, poco se sabe de esos antiguos pobladores. Hacia el 1250 a.C. diversos grupos que procedían del norte se establecieron en regiones como Chavín, Chimú, Nazca y Tiahuanaco.
A. El Imperio Inca
Los incas, llamados también “Hijos del sol”, eran originalmente una sociedad guerrera que vivía al suroeste de la región de La Sierra. Del 1100 al 1300 d.C. se trasladaron hacia el fértil valle del Cuzco, al norte, desde donde fueron invadiendo las tierras vecinas. Hacia el año 1500 habían creado un Imperio que incorporaba a la mayoría de las culturas de la zona y cuyos límites abarcaban desde el sur de la actual Colombia hasta el centro de lo que hoy es Chile, además de Bolivia y el norte de Argentina; el límite oriental llegaba hasta el océano Pacífico. Este vasto Imperio se constituyó siguiendo un modelo teocrático de gobierno en el que los emperadores incas formaban la cúspide del sistema y eran considerados divinidades. Los incas impusieron su estilo de vida a los pueblos que conquistaron y a comienzos del siglo XVI, antes de la llegada de los españoles, la mayor parte de la zona andina estaba bajo su dominio.
Los incas, llamados también “Hijos del sol”, eran originalmente una sociedad guerrera que vivía al suroeste de la región de La Sierra. Del 1100 al 1300 d.C. se trasladaron hacia el fértil valle del Cuzco, al norte, desde donde fueron invadiendo las tierras vecinas. Hacia el año 1500 habían creado un Imperio que incorporaba a la mayoría de las culturas de la zona y cuyos límites abarcaban desde el sur de la actual Colombia hasta el centro de lo que hoy es Chile, además de Bolivia y el norte de Argentina; el límite oriental llegaba hasta el océano Pacífico. Este vasto Imperio se constituyó siguiendo un modelo teocrático de gobierno en el que los emperadores incas formaban la cúspide del sistema y eran considerados divinidades. Los incas impusieron su estilo de vida a los pueblos que conquistaron y a comienzos del siglo XVI, antes de la llegada de los españoles, la mayor parte de la zona andina estaba bajo su dominio.
B. El Dominio Español
En 1528 el conquistador español Francisco Pizarro realizó una expedición hasta el río Santa, en Perú, reparando en la riqueza del Imperio; posteriormente regresó a España para obtener dinero y reclutar hombres para la conquista.
En 1569 llegó a Perú el virrey Francisco de Toledo; durante los siguientes catorce años impuso un sistema de gobierno estable y altamente efectivo, aunque bastante represivo. El método administrativo de Toledo consistió en dar prioridad a los funcionarios oficiales en los asuntos de gobierno, permitiendo que algunos indígenas ocuparan cargos intermedios y rigieran la actividad del resto de la población nativa. El sistema duraría casi doscientos años.
En 1528 el conquistador español Francisco Pizarro realizó una expedición hasta el río Santa, en Perú, reparando en la riqueza del Imperio; posteriormente regresó a España para obtener dinero y reclutar hombres para la conquista.
En 1569 llegó a Perú el virrey Francisco de Toledo; durante los siguientes catorce años impuso un sistema de gobierno estable y altamente efectivo, aunque bastante represivo. El método administrativo de Toledo consistió en dar prioridad a los funcionarios oficiales en los asuntos de gobierno, permitiendo que algunos indígenas ocuparan cargos intermedios y rigieran la actividad del resto de la población nativa. El sistema duraría casi doscientos años.
C. La Independencia
En 1780 se produjo una sublevación de 60.000 indígenas contra el poder español, acaudillada por José Gabriel Condorcanqui, cacique que había adoptado el nombre de uno de sus antepasados incas, Túpac Amaru. Aunque al comienzo cosechó algunas victorias, el levantamiento fue finalmente aplastado en 1781 y Túpac ejecutado. A pesar de que otra sublevación similar fue sofocada en 1814, la oposición al poder imperial español crecía imparablemente en toda América del Sur. La oposición era dirigida principalmente por los criollos, descendientes de españoles nacidos en América, resentidos por no poder participar en los asuntos de gobierno.
Sin embargo, la fuerza que liberaría a Perú del dominio español llegaría del exterior. En septiembre de 1820 el general José de San Martín, que había derrotado a las fuerzas españolas en Chile, desembarcó con su ejército en el puerto peruano de Pisco; en julio de 1821 el ejército de San Martín entró en Lima, que había sido abandonada por las tropas españolas.
La independencia del Perú se proclamó el 28 de julio de 1821. La lucha contra los españoles sería continuada después por el libertador venezolano Simón Bolívar, que entró en Perú con su ejército en 1822. La fase final de la emancipación americana se inició con la batalla de Junín, que se libró el 6 de agosto de 1824, y se selló definitivamente con la derrota de las fuerzas españolas en la batalla de Ayacucho el 9 de diciembre del mismo año.
En 1780 se produjo una sublevación de 60.000 indígenas contra el poder español, acaudillada por José Gabriel Condorcanqui, cacique que había adoptado el nombre de uno de sus antepasados incas, Túpac Amaru. Aunque al comienzo cosechó algunas victorias, el levantamiento fue finalmente aplastado en 1781 y Túpac ejecutado. A pesar de que otra sublevación similar fue sofocada en 1814, la oposición al poder imperial español crecía imparablemente en toda América del Sur. La oposición era dirigida principalmente por los criollos, descendientes de españoles nacidos en América, resentidos por no poder participar en los asuntos de gobierno.
Sin embargo, la fuerza que liberaría a Perú del dominio español llegaría del exterior. En septiembre de 1820 el general José de San Martín, que había derrotado a las fuerzas españolas en Chile, desembarcó con su ejército en el puerto peruano de Pisco; en julio de 1821 el ejército de San Martín entró en Lima, que había sido abandonada por las tropas españolas.
La independencia del Perú se proclamó el 28 de julio de 1821. La lucha contra los españoles sería continuada después por el libertador venezolano Simón Bolívar, que entró en Perú con su ejército en 1822. La fase final de la emancipación americana se inició con la batalla de Junín, que se libró el 6 de agosto de 1824, y se selló definitivamente con la derrota de las fuerzas españolas en la batalla de Ayacucho el 9 de diciembre del mismo año.