Proyecto “Emprende y Despega”: ¿cómo beneficia al fortalecimiento de emprendimientos de personas con discapacidad?

El proyecto piloto “Emprende y Despega”, impulsada por el Conadis, con apoyo técnico del Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes), representó una gran oportunidad para emprendedores con discapacidad de Lima y Callao, dado que, con una partida presupuestal de S/ 2.5 millones, permitie potenciar las ideas de negocio de este sector de la población. 

 

Durante la primera etapa de convocatoria se seleccionaron a 400 beneficiarios/as con discapacidad, bajo las dos únicas modalidades de postulación de ‘emprendimientos formalizados’ y ‘emprendimientos por formalizar’.

 

De esta forma, las y los beneficiarios accedieron a asistencias técnicas, a cargo de especialistas en las materias de gestión empresarial, marketing y fortalecimiento de habilidades blandas, a fin de que, como producto final, elaboraran un plan de mejora de cada negocio.

 

Estos planes de mejora de negocio debían ser revisados y aprobados, debiendo considerar una propuesta de bienes e insumos necesarios para fortalecimiento del emprendimiento. De acuerdo a los lineamientos publicados, en el numeral 7.3 Etapa de Financiamiento de las VII. Disposiciones Específicas, se establece el valor de hasta S/ 5,000 para ‘emprendimientos por formalizar’ y hasta S/ 7,000 para ‘emprendimientos formalizados’ al momento de postular al proyecto.

 

Así y tras la evaluación correspondiente, 320 emprendedores quedaron aptos para pasar a las siguientes etapas de financiamiento y comercialización. Sin embargo, en análisis previo se logró identificar la oportunidad de ampliar a 17 beneficiarios/as adicionales con planes de mejora de negocio aprobados y disponibilidad presupuestal para su cobertura.  

 

A la fecha, el Núcleo Ejecutor continúa realizando la entrega de bienes e insumos a las y los emprendedores con discapacidad. En ese sentido, y de acuerdo a la programación de rutas y coordinaciones previas, el equipo a cargo continuará contactando y monitoreando a las y los beneficiarios con discapacidad, a fin de determinar el horario de entrega que garantice su presencia física en la dirección consignada en su inscripción.