“ Motor de inclusión”: madres con fuerza de acero y corazón de oro
Nota de prensaDos historias de amor inquebrantable frente a la discapacidad. En este Día de la Madre, celebramos su coraje silencioso y su abrazo que nunca suelta.

11 de mayo de 2025 - 5:00 a. m.
En cada palabra de aliento, en cada madrugada de desvelo, hay relatos que no siempre se cuentan. En este Día de la Madre, honramos a esas mujeres que se convirtieron en madres con una misión aún más grande, acompañar a sus hijos con discapacidad en un camino lleno de desafíos y de amor sin medida.
El orgullo de una madre “hincha”
Martha Dianderas es la progenitora de Maleny, una joven con discapacidad física que brilla con luz propia. Maleny es docente de educación primaria y además representa internacionalmente al Perú como paradeportista en la disciplina de tiro con arco. Su historia, está enriquecida desuperación y constancia. “Ella es una bendición de Dios y la admiro bastante”, dice Martha con los ojos brillosos, dejando ver la adoración que siente por su hija.
Martha no se dejó derrumbar por la noticia de la discapacidad de Maleny. Al contrario, fue su principal impulso. “Uno nunca está preparada para ser madre y menos en esta circunstancia, pero saqué muchas fuerzas y amor para mi hija”, indicó.
Para esta madre luchadora, ver a su hija cumplir sus metas profesionales es el más grande regalo. Hoy se considera su “hincha número uno”, y agradece profundamente a su familia por el respaldo que le permitió sostenerse en los momentos más difíciles.
Una madre que nunca se rinde
Silvia Zapata es madre de Piero, un joven universitario de 23 años con el síndrome de Charge, una enfermedad rara o huérfana que afecta diversas funciones del cuerpo. Sin embargo, más allá del diagnóstico, ella ve en su hijo a un ser humano valioso, con sueños y una vida por delante.
“Dios me dio la oportunidad de darle mucho amor a mi hijo”, señala Silvia con una dulzura que enternece. A pesar del cansancio, del miedo, de las preguntas sin respuestas, ella se levanta cada día con una sola misión: Piero debe tener una vida digna, feliz y plena.
Silvia nos enseña que la maternidad en contextos de discapacidad es también un ejercicio diario de esperanza. Su historia, como la de Martha, nos recuerda que el amor de una madre no conoce límites.
Silvia nos enseña que la maternidad en contextos de discapacidad es también un ejercicio diario de esperanza. Su historia, como la de Martha, nos recuerda que el amor de una madre no conoce límites.
Un sincero homenaje
Desde el MIMP Conadis celebramos a todas las mujeres que, como Martha y Silvia, han hecho de la maternidad un ejemplo de coraje. Ellas no solo educan, también inspiran, sostienen y transforman a la sociedad con valores de inclusión y empatía cotidiana.