Mesa Interinstitucional de Desarrollo Docente dialogó sobre remuneración docente

La Mesa Interinstitucional de Desarrollo Docente que lidera el Consejo Nacional de Educación convocó a los investigadores César Guadalupe (Universidad del Pacífico/ CNE), Hugo Ñopo (Grade) y Ricardo Cuenca (IEP/ CNE), para dialogar sobre la remuneración docente. Los comentarios a lo expuesto fueron realizados por dos funcionarios del ministerio de Educación: Jorge Arrunátegui, director General de Desarrollo Docente, y Miguel Cárdenas, Director de Trayectoria Docente. La sesión fue moderada por el consejero Jorge Jaime, coordinador de la Comisión de Desarrollo Docente del CNE.

Durante sus presentaciones, los expertos coincidieron en indicar que el problema docente no se solucionará subiendo solamente los sueldos de los maestros ya que también intervienen otros factores. En este sentido, Guadalupe explicó que, según la investigación que realiza actualmente, el salario de un profesor en términos reales es ahora cinco veces mayor que en los años noventa. Sin embargo, agregó "cinco veces más ahora puede seguir siendo poco considerando que el punto de partida salarial es extremadamente bajo”. Pese a ello, miles de docentes han continuado en la carrera y han seguido ingresando muchos más. Esta situación “…no se explica necesariamente por vocación o porque no tenían otra opción sino que hay que juntar todas las razones para entender una historia que es más compleja”, mencionó.

Destacó dos aspectos preocupantes: el primero, las bajas pensiones de jubilación que recibirán los docentes, debido a que la mayor parte de los incrementos salariales recibidos han sido no pensionables, sobre todo en la década de los 90 y parte del 2000. “En los próximos 15 años la mitad de los maestros en servicio se van a jubilar. Ahí hay un problema real que debe mirarse y que no está presente en el debate actual”. El segundo, tiene que ver con el trabajo docente como profesión de tiempo completo. Resulta necesario, explicó, determinar medidas que aseguren que la profesión del maestro sea de tiempo completo, lo cual está asociado a la revalorización de la carrera docente.

Finalmente, agregó que -según datos sobre primeros empleos del portal Ponte en Carrera- los profesores que trabajan en el sector privado tienden a ganar sustancialmente menos que los del sector público. En su mayoría, estos profesores son jóvenes y trabajan momentáneamente en el sector privado, mientras consiguen otras oportunidades.

El investigador Hugo Ñopo basó su exposición en un estudio que presentó recientemente sobre el salario docente y de otros profesionales-técnicos en América Latina. Indicó que, al comparar el salario docente con el salario de cualquier otro profesional/técnico, se evidencia aumentos en ambos, pero mucho más en los segundos. “Un profesor en Perú gana 25% menos que un profesional en América Latina”, mencionó.

Actualmente, comentó, el perfil del profesional atraído a la carrera docente no es el más idóneo y eso sucede en varios países de Latinoamérica. Esta situación, agregó, no cambiará incrementando solo el sueldo de los docentes. Por ello, se tiene que mejorar el estatus de la carrera. Mencionó algunos aspectos del perfil de los docentes, dijo que es una profesión mayoritariamente de sexo femenino, con trabajo a tiempo parcial, con un segundo empleo y que presenta poco cambio generacional.

Sobre los profesores de colegios privados, alertó que tienen salarios notablemente bajos y, en su mayoría, trabajan entre 50 y 60 horas semanales por remuneraciones inferiores a las que perciben quienes trabajan en el sector público. “Con profesores en esa situación es difícil pensar en una educación de calidad”, acotó.

Por su parte, Ricardo Cuenca mostró algunos datos -trabajados con Yina Rivera y Jorge Cutipa (Equipo Técnico, CNE)- de la ENDO 2014 realizada por el Consejo Nacional de Educación. Manifestó que, independientemente del grado de satisfacción salarial que tengan los maestros, estos se sienten satisfechos por la actividad pedagógica que desarrollan y los resultados obtenidos por sus estudiantes.

Señaló que “solo el 21% de docentes dijeron estar satisfechos con el salario que perciben y el 79% insatisfecho. Sin embargo, cuando cruzamos la información con la satisfacción que sienten por su actividad pedagógica, más del 90% dice estar satisfecho. Esto se repite respecto a la satisfacción que sienten frente a los logros que tienen sus estudiantes, con la cual más del 80% está satisfecho”, refirió.

Cuenca finalizó refiriéndose a una corriente que impulsan algunos países de América Latina en los cuales se está desasociando los salarios de los ascensos verticales. En esos contextos, aumentar las horas de trabajo no resultaría en un aumento de sueldo porque la política salarial esta relacionada con el vínculo y la valoración al trabajo. Teniendo en cuenta estas corrientes habría que afinar las políticas salariales y asociarlas de manera distinta a la carrera. (CNE Prensa).