CNE presenta hoja de ruta para transformar el licenciamiento en la Educación Superior Tecnológica

El Consejo Nacional de Educación (CNE) presentó la publicación “Licenciamiento en la Educación Superior Tecnológica: situación actual y recomendaciones para una mejora integral”, una propuesta para reformar el sistema de este nivel formativo y contribuir al fortalecimiento de la calidad educativa, destacando los logros alcanzados, así como los principales desafíos que aún persisten en materia de infraestructura, gestión institucional, formación docente y servicios dirigidos a los estudiantes.

Durante el evento, organizado por la Comisión Permanente de Educación Superior del CNE, se expusieron los principales desafíos del modelo actual, entre los cuales destacan la sobrerregulación del sistema, las condiciones básicas de calidad desactualizadas, las brechas significativas en infraestructura y financiamiento, así como la inequidad en las capacidades institucionales, especialmente en las instituciones públicas.

Ante este escenario, el CNE propone una serie de aportes, como simplificar los procesos de licenciamiento, promover una mejor articulación entre el Ministerio de Educación (Minedu) y el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (Sineace), actualizar las Condiciones Básicas de Calidad con un enfoque territorial, e implementar mecanismos efectivos de supervisión postlicenciamiento. Asimismo, plantea diseñar estrategias diferenciadas de apoyo para los institutos públicos y fortalecer las capacidades institucionales del Estado.

La presentación del documento estuvo a cargo de Ricardo Rosas, integrante del equipo técnico del CNE, quien expresó que según la Dirección de Gestión de Instituciones de Educación Técnico-Productiva y Superior Tecnológica y Artística del Ministerio de Educación (Digest-Minedu), al 2024 solo 20 institutos públicos de 15 regiones cuentan con licenciamiento, representando apenas el 5.5% de las 367 instituciones públicas existentes. En el sector privado, el panorama no es mucho mejor. Solo el 31.7% (127) de las 401 instituciones privadas existentes cuentan con licenciamiento.

Agregó que problemas como la falta de financiamiento, la burocracia, la infraestructura deficiente, la ausencia de planificación y de voluntad política dificultan el proceso de licenciamiento, volviéndolo ineficiente y poco transparente. A ello, hay que sumarle una gobernanza poco pertinente y débil capacidad estatal.

El panel de expertos, moderado por la consejera María Isabel León, contó con la participación de Valerie Sánchez (Minedu), Miguel Calderón (CONEACES-SINEACE), Andrés Oblitas (ASIEES) y Alfonso Vigo (IES Huando), quienes coincidieron en la urgencia de implementar cambios sustanciales para garantizar una educación tecnológica pertinente y que fomente la empleabilidad.

León señaló que las cifras, como el 81 % de actores que aún no han ingresado al sistema, evidencian que el proceso de licenciamiento no ha logrado sus objetivos, lo que demuestra la necesidad de revisar y mejorar el enfoque actual. En ese sentido, destacó la importancia de considerar propuestas como la implementación de un licenciamiento único. Sánchez destacó las reformas que el Minedu impulsará en el proceso de licenciamiento, como la modernización del reglamento, la implementación de un nuevo cronograma y la promoción de asistencias técnicas diferenciadas. Por su parte, Vigo subrayó que el principal desafío radica en el financiamiento, a pesar de contar, según la ley, con autonomía presupuestal.

Oblitas apoyó la propuesta de un nuevo cronograma, pero enfatizó que debe ser de cumplimiento obligatorio, además de proponer una supervisión anual para asegurar que los institutos cumplan con sus compromisos. Finalmente, Calderón resaltó la necesidad de modificar el marco normativo del licenciamiento y la acreditación, con el objetivo de avanzar hacia una reforma integral y definitiva en el sector.

Finalmente, el presidente del CNE, Luis Lescano, destacó que la publicación es el resultado de un proceso consultivo amplio, que incluyó entrevistas, mesas de trabajo y encuestas a actores clave del sector y que las recomendaciones no marcan el fin de un proceso, sino el inicio de una transformación necesaria que requiere de voluntad política, evidencia y diálogo para avanzar hacia un sistema más justo, transparente y orientado a resultados. Además, reafirmo el consenso de todos sobre la necesidad de una transformación integral del sistema de licenciamiento, basada en la evidencia y la corresponsabilidad entre los distintos actores del ecosistema educativo.