ANA identifica puntos críticos en río Piura y quebrada San Francisco

La Autoridad Nacional del Agua, adscrita al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, identifica los puntos más vulnerables a lo largo del río Piura y quebrada San Francisco, con el fin de elaborar fichas técnicas para establecer puntos críticos que permita realizar obras de protección y encauzamiento. Esto, en coordinación con la Municipalidad Distrital de Tambogrande y la Junta de Usuarios del Sector Hidráulico San Lorenzo.

Profesionales de la Administración Local del Agua (ALA) San Lorenzo, luego de conocer que por el río Piura pasó un caudal superior a los 1400 metros cúbicos por segundo, recorrieron los principales sectores adyacentes a este río, en margen izquierda y derecha, para identificar los puntos más vulnerables que ponen en riesgo a la población y cultivos permanentes.

En el recorrido por los subsectores se comprobó desbordes en El Carbón, Los Zapatas, San Martín de Malingas, Curvan, Las Mónicas, La Rita, La Greda Nueva, La Greda Vieja, Locuto, La Angostura, Ocoto Bajo, Santa Ana, entre otros. En este momento se vienen elaborando fichas técnicas para su reporte.

Se trabaja de manera coordinada con la Municipalidad Distrital de Tambogrande para reportar los daños en el Sistema Nacional Para la Respuesta y Rehabilitación (Sinpad) y elaborar fichas técnicas que permitan gestionar la construcción de defensas ribereñas, como espigones, empedrado, diques, enrocado, gaviones y defensas con infraestructura natural.

El titular de la ALA San Lorenzo, Wilson Carranza, explicó que se busca evaluar las condiciones de vulnerabilidad en las fuentes naturales para generar una propuesta de contingencia en áreas poblacionales como de cultivos permanentes.

Agregó que el trabajo coordinado permitirá la priorización de las obras y la ejecución de la mismas ya que se viene trabajando con las autoridades locales, dirigentes agrarios y representantes de la sociedad civil.

Es importante señalar que San Lorenzo es el valle que ha registrado lluvias hasta de 159 milímetros, uno de las más altos de la región, afectando directamente la infraestructura de riego y caminos de servicio.