ANA actualiza identificación de fuentes contaminantes del río Rímac para fortalecer su recuperación

La Autoridad Nacional del Agua (ANA), entidad adscrita al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), ejecutó la actualización de la identificación de fuentes contaminantes en la parte media y baja de la cuenca del río Rímac, comprendida desde Santa Eulalia (provincia de Huarochirí) hasta el Callao.

Esta acción se desarrolló a través de la Administración Local de Agua (ALA) Chillón-Rímac-Lurín, en cumplimiento del Plan Anual de Evaluación y Fiscalización Ambiental (PLANEFA), y en concordancia con los lineamientos técnicos establecidos en la Resolución Jefatural n.° 136-2018-ANA, que aprueba el procedimiento para la identificación y seguimiento de fuentes contaminantes relacionadas con los recursos hídricos.

Durante el recorrido de campo, se inspeccionaron diversos vertimientos de aguas residuales, zonas de arrojo de desmontes y otros focos contaminantes que impactan negativamente en el río Rímac y sus afluentes, principal fuente de abastecimiento de agua para Lima Metropolitana y el Callao. Como resultado, se identificó que el distrito de Lurigancho-Chosica concentra el mayor número de fuentes contaminantes a lo largo de esta cuenca.

El objetivo de esta intervención es clasificar, registrar y hacer seguimiento a las fuentes de contaminación que afectan el recurso hídrico, con el propósito de compartir la información generada con los gobiernos regionales y locales, así como con las entidades competentes en la gestión del agua. Esto permitirá adoptar medidas concretas orientadas a la recuperación del río y la protección de los ecosistemas acuáticos.

De esta manera la ANA reafirma su compromiso con la gestión integrada y sostenible de los recursos hídricos, articulando esfuerzos técnicos e institucionales para garantizar el acceso a agua de calidad para todos los peruanos y peruanas.

Una fuente contaminante del agua es toda aquella que, al ingresar de forma sólida o líquida, directa o indirectamente a un cuerpo natural de agua superficial o subterránea, puede alterar sus condiciones naturales (físicas, químicas o biológicas), afectando su capacidad de uso y el equilibrio del ecosistema, sea en el corto, mediano o largo plazo. El PLANEFA es el instrumento que permite planificar acciones de fiscalización ambiental, como la evaluación, supervisión y aplicación de sanciones, para asegurar el cumplimiento de la normativa ambiental vigente.