ANA descolmató 24 puntos críticos del río Rímac como medida de prevención ante lluvias de temporada
Nota de prensaDe manera extraordinaria, la Autoridad Nacional de Agua recibió el encargo de intervenir en 43 puntos críticos distribuidos a lo largo de 30 Km en ocho distritos de Lima.

19 de febrero de 2025 - 4:30 p. m.
Como parte del compromiso del Gobierno con la prevención ante las lluvias de temporada, la Autoridad Nacional del Agua anunció que, a la fecha, se ha culminado con los trabajos de limpieza y descolmatación de 24 puntos críticos ubicados a lo largo del río Rímac.
“La Autoridad Nacional del Agua recibió el encargo del Grupo Fuerza Tarea Ministerial para intervenir en 43 puntos críticos ubicados en el río Rímac; de los cuales, ya se culminaron los trabajos en 24 puntos críticos, 17 están en proceso y 2 están en programación. Todos ellos, distribuidos a lo largo de 30 Km en ocho distritos de Lima”, señaló el titular de la Dirección de Planificación y Desarrollo de los Recursos Hídricos, Magdalena Guimac.
De manera complementaria, indicó que se tiene previsto culminar estas intervenciones en 43 puntos críticos para el mes de marzo. Además, resaltó la importancia de trabajar de manera articulada con las autoridades locales.
La colmatación de los ríos es importante, debido a que la corriente arrastra lodo, piedras y otros elementos, que con el paso del tiempo dificultan o reducen su cauce regular, generando desbordes. Por ello, la importancia de intervenir en estos puntos que pueden representar una amenaza a las poblaciones aledañas.
Prevención para el abastecimiento de agua
Con respecto a las labores de limpieza en el tramo de La Atarjea, indicó que era necesario enfocar los esfuerzos en esta área a fin de proteger a la población de eventuales complicaciones en el suministro hídrico.
Con el uso de estudios topográficos, monitoreos constantes e inspecciones de campo, se determina el riesgo en cada sector, para estimar que área precisa una pronta intervención. Con ello se determinó que el sector de La Atarjea era un punto crítico que debía pronta atención, para la ejecución de la limpieza y la protección de sus márgenes.
Las acciones que realiza la ANA en este importante afluente de la capital refuerzan su compromiso para salvaguardar el recurso hídrico de la población, y protegerlo ante eventuales desbordes generados por la fuerza de la naturaleza.
“La Autoridad Nacional del Agua recibió el encargo del Grupo Fuerza Tarea Ministerial para intervenir en 43 puntos críticos ubicados en el río Rímac; de los cuales, ya se culminaron los trabajos en 24 puntos críticos, 17 están en proceso y 2 están en programación. Todos ellos, distribuidos a lo largo de 30 Km en ocho distritos de Lima”, señaló el titular de la Dirección de Planificación y Desarrollo de los Recursos Hídricos, Magdalena Guimac.
De manera complementaria, indicó que se tiene previsto culminar estas intervenciones en 43 puntos críticos para el mes de marzo. Además, resaltó la importancia de trabajar de manera articulada con las autoridades locales.
La colmatación de los ríos es importante, debido a que la corriente arrastra lodo, piedras y otros elementos, que con el paso del tiempo dificultan o reducen su cauce regular, generando desbordes. Por ello, la importancia de intervenir en estos puntos que pueden representar una amenaza a las poblaciones aledañas.
Prevención para el abastecimiento de agua
Con respecto a las labores de limpieza en el tramo de La Atarjea, indicó que era necesario enfocar los esfuerzos en esta área a fin de proteger a la población de eventuales complicaciones en el suministro hídrico.
Con el uso de estudios topográficos, monitoreos constantes e inspecciones de campo, se determina el riesgo en cada sector, para estimar que área precisa una pronta intervención. Con ello se determinó que el sector de La Atarjea era un punto crítico que debía pronta atención, para la ejecución de la limpieza y la protección de sus márgenes.
Las acciones que realiza la ANA en este importante afluente de la capital refuerzan su compromiso para salvaguardar el recurso hídrico de la población, y protegerlo ante eventuales desbordes generados por la fuerza de la naturaleza.