ANA delimitará 108 kilómetros de fajas marginales en los ríos Huancabamba y Chamaya

Nota de prensa
Acción beneficia a pobladores de Jaén y San Ignacio.
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2 de diciembre de 2024 - 9:59 a. m.

La Autoridad Nacional del Agua (ANA), entidad adscrita del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), supervisó la instalación de 10 puntos geodésicos de orden C en los márgenes de los ríos Huancabamba y Chamaya, en la provincia de Jaén.

Con esta actividad se inician los estudios topográficos necesarios para delimitar 108 kilómetros de fajas marginales, una acción clave para la seguridad hídrica, la protección ambiental y la prevención de riesgos en la región.

La delimitación de estas áreas protegidas responde al compromiso establecido en la carta de entendimiento entre la ANA, el Proyecto Especial Olmos Tinajones (PEOT) y la Concesionaria Trasvase Olmos (CTO). Este esfuerzo conjunto busca establecer límites claros en ambas márgenes de los ríos, desde aguas abajo de la presa Limón hasta la desembocadura en el río Marañón, dentro de la jurisdicción de la Administración Local de Agua (ALA) Chinchipe Chamaya.

La ANA, en el marco de sus competencias, se encargará de elaborar los estudios hidrológicos de máximas avenidas, determinar las huellas máximas de inundación, definir los anchos mínimos y máximos de las fajas marginales y emitir las resoluciones correspondientes que oficialicen esta delimitación.

El director de la Autoridad Administrativa del Agua (AAA) Marañón, Benjamín Suárez Rivadeneyra, y la administradora local del Agua Chinchipe Chamaya, Carmen Orrego, supervisaron las labores de instalación junto a representantes locales, como el presidente de la Junta de Usuarios del Sector Hidráulico Menor Jaén San Ignacio, Juan Eduardo Torres Huamán, y el gerente Anderson Angulo Alarcón.

Como medida complementaria, se realizarán talleres de sensibilización y capacitaciones para las comunidades locales, con el objetivo de informar sobre los beneficios de estas acciones, que incluyen la mitigación de riesgos por desbordes y la conservación de los ecosistemas ribereños.

Estas acciones, que son posibles gracias a la articulación entre las autoridades locales y la ANA, tienen un impacto directo en las comunidades de Jaén y San Ignacio. Los habitantes de estas áreas, que dependen de los ríos Huancabamba y Chamaya para sus actividades agrícolas, ganaderas y de abastecimiento de agua, se beneficiarán de una mayor seguridad y planificación hídrica, contribuyendo al desarrollo sostenible de la región.

Con este proyecto, la ANA reafirma su compromiso con la gestión integral de los recursos hídricos y la protección del medio ambiente, asegurando el bienestar de las poblaciones y la sostenibilidad de las fuentes de agua en el norte del Perú.