Tumbes se declara como región inclusiva y respetuosa de la niñez y adolescencia

Esta mañana el Gobierno Regional de Tumbes y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia – UNICEF   suscribieron el compromiso de trabajar por el bienestar y los derechos a cada niña, niño y adolescente que vive o está de tránsito en la región. 

Este compromiso en el que Tumbes se declara como Región inclusiva y respetuosa de la niñez y adolescencia fue firmado por el Gobernador Regional de Tumbes, Segismundo Cruces Ordinola y Representante de UNICEF en Perú,  Javier Álvarez. 

Con esta declaratoria la Región Tumbes se compromete a trabajar para que cada niña, niño y adolescente que vive o está de tránsito por la región Tumbes: tenga acceso a servicios de salud y nutrición de calidad, con pertinencia cultural y que respondan a las necesidades de cada etapa de sus vidas; pueda mejorar sus aprendizajes e integrarse a la comunidad educativa;  reciba un trato digno y respetuoso en todas las instituciones públicas y privadas, y se convierta en la prioridad en toda respuesta a una situación de emergencia.

Al respecto, el Gobernado regional destacó que con la suscripción de esta declaratoria Tumbes se convierte en la primera región inclusiva y respetuosa de la niñez y adolescencia.

Por su parte el Representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia resaltó que el rol de UNICEF es trabajar con las autoridades regionales y locales para coadyuvar con sus esfuerzos por garantizar los derechos de la niñez y adolescencia. “La causa de la infancia nos convoca a todos, cooperación internacional, estado, academia y empresa, todos reconocemos la importancia de que los chicos y chicas tengan buena salud, nutrición, educación, protección frente a la violencia, entonces unámonos para lograrlo”, puntualizó

La Declaratoria firmada por los representantes del Gobierno Regional de Tumbes y Unicef se sustenta en la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por el Perú en 1990. Este tratado establece que todos los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a un nivel de vida adecuado para su desarrollo físico, moral y social y que si bien son los padres los responsables de que ellos cuenten con lo necesario para vivir de una forma digna, corresponde a las autoridades ayudarlos a garantizar este derecho. 

La CDN también señala que aquellos niños y niñas que por alguna razón hayan tenido que abandonar su país serán objeto de protección especial y que las autoridades deberán colaborar con las organizaciones que los ayudan y protegen.