San Martín: labor de guardaparques permite mantener el buen estado de conservación del ACR -Cordillera Escalera

Nota Informativa
Respeto y consideración por su diaria labor en favor de nuestras fuentes de agua.
Guardaparques del ACR Cordillera Escalera

Fotos: PEHCBM

PEHCBM

15 de mayo de 2024 - 11:01 a. m.


Existe una profesión que implica vivir, sentir y amar la selva, para cuidar la flora y fauna del bosque, el mismo que nos provee de diferentes servicios ecosistémicos. Son los guardaparques, que llevan una rutina como cualquier otro trabajo en la que se combinan los conocimientos ancestrales con las tecnologías de monitoreo, vigilancia y control lo cual implica una dedicación exclusiva a la naturaleza.                     
 “Si no hubiera guardaparques, posiblemente en el área se desarrollarían actividades ilegales y las nuevas generaciones ya no conocerían algunos especies forestales y animales que tienen su hábitat en esta reserva, si no hubiera guardaparques las cabeceras de cuenca y vertientes de agua que en ella nacen, se verían afectadas señala el coordinador del equipo de Guardaparques del Área de Conservación Regional (ACR) Cordillera Escalera, César Bardalez Pizarro, al ser preguntado por la sacrificada labor de sus compañeros  en la vigilancia y control del Área Natural Protegida (ANP).  


 
“En el ACR Cordillera Escalera contamos con 23 guardaparques distribuidos en 10 Puestos de Vigilancia y Control (PVC), ubicados en Jesús del Monte (03), Achual Sanangal (02), Sedamillo (03), Bello Horizonte (03), Chumia (03), Nuevo Soritor (03), El Piñal (01), Unión de Cachizapa (01), y Pongo de Caynarachi (02), que se involucran en la protección y preservación de todos los aspectos del área natural, por lo tanto, un guardaparque es un guardián de la naturaleza que protege los recursos naturales y un maestro que nos enseña la importancia de la zona que visitamos”, manifestó Bardalez Pizarro.      
Por su parte el jefe del Área de Conservación Regional (ACR) Cordillera Escalera; Queny Pinedo Pezo, refirió que los guardaparques libreta en mano, distinguen diferentes tipos de hojas, tallos, raíces; diferencian el canto de las aves, advierten el sutil movimiento de monos en árboles lejanos y encuentran de forma mágica huellas casi invisibles de cualquier animal que ha pisado el bosque. “Todos estos conocimientos atávicos van de la mano con las herramientas tecnológicas que monitorean especies, y pronto con la instalación de cámaras-trampa ya se tiene registro de los movimientos de la fauna, como el de pequeños felinos, sachavacas, huanganas o manadas de sajinos”.


El trabajo como guardaparques consiste también en enfocarse en las oportunidades de desarrollo para miles de familias, como el turismo y el aprovechamiento de recursos naturales. Trabajando de la mano con organizaciones que colaboran desde distintos niveles, en favor de la protección, el rol del guardaparques es clave para su gestión y conservación.

Dato: 
Cada año en Perú, el 6 de diciembre se celebra el Día del Guardaparque Peruano. En el Perú existen más de 250 puestos de control y vigilancia que tienen las ANP a lo largo de nuestro territorio nacional. El trabajo de cada guardaparque no solo tiene impacto en el Área Nacional Protegida (ANP) en sí, sino también en los miles de visitantes, entre ellos estudiantes y profesionales que pueden visitar, trabajar y aprender durante sus visitas a estos espacios. Esto con el objetivo de investigar para conocer más sobre la biodiversidad que albergan estos territorios protegidos por el Estado.